La Cámara de Diputados discutirá esta semana la reforma al artículo 4 constitucional, enviada por el Ejecutivo federal, para que quede garantizado en la Carta Magna la pensión para personas adultas mayores, el pago de becas para jóvenes estudiantes de escasos recursos y que, también, quede establecido el acceso universal a los servicios de salud.
El dictamen prácticamente ya está listo en las comisiones de Puntos Constitucionales y de Salud para que sea turnado al pleno para su discusión y aprobación.
Mario Delgado, coordinador de los diputados de Morena, confió que estas reformas sean apoyadas por los legisladores de todos los partidos políticos.
Precisó que de acuerdo con la iniciativa del Ejecutivo, se propone crear el Sistema de Salud para el Bienestar, para hacer efectivo el derecho de toda persona de acceder a servicios de salud suficientes y de calidad.
Señaló que otro punto será establecer un apoyo económico a personas con discapacidad, como forma de equilibrar sus oportunidades de superación y bienestar, mientras que el tercer asunto es elevar a rango constitucional la pensión para personas adultas mayores, como una expresión de solidaridad del Estado mexicano con aquellos cuyo esfuerzo ha contribuido al desarrollo de nuestro país.
Por último, se propone crear un sistema de becas para las y los estudiantes de todos los niveles escolares, porque garantizar el ejercicio del derecho a la educación es la mejor inversión que puede realizar una sociedad.
“México es un país marcado por una profunda desigualdad económica y social, que mantiene en la pobreza y marginación a la mitad de sus habitantes. Es uno de los 25 países del mundo con mayor desigualdad”, refirió el diputado.
Delgado Carrilo señaló que frente a esta situación es necesario garantizar el goce de los derechos sociales sustanciales para que toda persona tenga la oportunidad de superar su situación de pobreza y brindar a su familia un nivel óptimo de bienestar.
Señaló que con esta reforma constitucional al artículo 4 se crearán las condiciones necesarias para que 21 millones de personas que no están afiliadas a ningún servicio de salud, público o privado, puedan acceder al Sistema de Salud para el Bienestar.