La jefa de Gobierno de la Ciudad de México (CDMX), Claudia Sheinbaum, descartó que las fuertes lluvias registradas durante los últimos días en la capital se deban al bombardeo de nubes que se anunciaron para abastecer las presas del Sistema Cutzamala ante la sequía que enfrenta la Zona Metropolitana del Valle de México.
“No. Hay dos fenómenos que ocurren en ciudades como la Ciudad de México, uno es evidentemente es la lluvia que se da por fenómenos meteorológicos, y la segunda, particularmente el granizo tiene que ver con el fenómeno de isla de calor”, aseguró durante conferencia de prensa.
Asimismo, Sheinbaum explicó que el fenómeno de la isla de calor sucede cuando el pavimento se calienta. En consecuencia, la superficie emite calor, que luego se mezcla con el gradiente en la atmósfera, lo que provoca chubascos y granizo.
La Dra. @Claudiashein confirma que las recientes lluvias en la #CDMX no son a causa del bombardeo de nubes, pueden deberse al fenómeno de Isla de Calor que propicia fuertes lluvias y la caída de granizo como se presentó el día de ayer en varias zonas. pic.twitter.com/ZL5MgcZIps
— Eduardo Rosas 2.0 (@EduardoRosass) March 30, 2023
Afectaciones por lluvias
Con respecto a las personas afectadas por las lluvias en la alcaldía Álvaro Obregón, la funcionaria informó que se realiza un censo de los daños. También dijo que la CDMX cuenta con un seguro para brindar apoyo en este tipo de situaciones.
En este sentido, debido a las lluvias de ayer se reportaron cinco árboles caídos, tres ramas, un anuncio espectacular y diez encharcamientos en la demarcación.
¿Qué es el bombardeo de nubes?
Uno de los métodos más utilizados para provocar lluvia artificialmente es la siembra o bombardeo de nubes. Este método consiste en depositar químicos dentro de una nube ya formada y en crecimiento para facilitar la formación de gotas de lluvia. De esta manera se propicia la precipitación.
Por el momento no hay estudios que adviertan de un riesgo a la salud por usar agua de nubes bombardeadas.
De la misma manera, es importante destacar que la siembra de nubes no es una solución permanente para la sequía.