Bicicletas eléctricas Honey Whale: ¿problema o solución a la movilidad en CDMX?

Las bicicletas y escúteres eléctricos Honey Whale están ocasionando un problema de movilidad en la Ciudad de México (CDMX) debido a su proliferación, falta de regulación y por estar consideradas como una opción, supuestamente, de transporte sustentable.

Dicha marca comenzó a comercializarse en la capital desde el año 2022 y actualmente, es común ver circular sus vehículos por las principales avenidas de la metrópoli.

En este sentido, Víctor Alvarado, especialista en movilidad y políticas públicas, sostiene que la falta de regulación podría derivar en un agravamiento de la problemática de seguridad vial en la CDMX.

Por su parte, la empresa Honey Whale afirma, en su portal electrónico, que sus escúteres y sus bicicletas son cada vez más usadas y son parte del “futuro de la movilidad”.

“El futuro de la movilidad eléctrica en México parece brillante a medida que más personas recurren a este tipo de vehículos para sus desplazamientos diarios. Los precios son cada vez más asequibles, y esto podría conducir a un aumento en el número de personas que utilizan vehículos eléctricos frente a los tradicionales. Esto podría resultar en un ambiente más limpio para todos”, menciona la empresa.

Es importante mencionar que las bicicletas eléctricas tienen precios al público que van desde los 9 mil hasta los 12 mil pesos, lo que las hace más asequibles que comprar una motocicleta.

¿Se deben regular los scooter y bicis Honey Whale?

Los scooter y bicicletas Honey Whale alcanzan velocidades que superan los 25 kilómetros por  hora, lo que va en contra de lo establecido en la Ley de Movilidad, específicamente en su artículo 9 fracción CIV, que menciona que la velocidad permitida a vehículos no motorizados ya sea asistidos eléctricamente o a tracción humana debe ser menor, explicó en entrevista con Reporte Índigo el especialista en movilidad y políticas públicas.

“Superando los 25 kilómetros por hora deben ser regulados como un vehículo motorizado y lo más cercano en sanciones son las motocicletas, y son sancionables actos que van desde no traer casco, llevar a menores, ausencia de placas, entre otras”, detalló Alvarado.

Asimismo, el especialista abundó en que su uso cotidiano es más notorio y, en el mediano plazo, será más difícil regularlo porque podría implicar costos políticos.“Estamos en un buen momento para su regularización como ocurrió con los servicios de bicicletas asistidas eléctricamente que, de cuatro empresas que había, solo una se mantuvo a flote”, agregó.

Alvarado refirió que, en caso de que no se regulen oportunamente este tipo de vehículos, podrían aumentar los accidentes y percances viales en los que las bicicletas eléctricas sean protagonistas.

Cabe señalar que la capital del país atraviesa por una situación de seguridad vial grave. Datos del “Reporte Trimestral de Hechos de Tránsito Abril-Junio de 2024”,  revelan que los fallecidos por percances viales aumentaron más del 30 por ciento.

“En el segundo trimestre de 2024, se tuvo un aumento de 38 por ciento en el número de personas fallecidas por siniestros de tránsito respecto al mismo periodo de 2023 (pasando de 107 a 148) y de 66 por ciento en comparación con dicho periodo de 2019 (pasando de 89 a 148)”, puntualiza el documento.

Aunado a esto, el reporte de la Secretaría de Movilidad, detalla que de enero a junio de 2024 la Secretaría de Seguridad Ciudadana registró 272 personas fallecidas por hechos de tránsito, lo que implica un incremento de 37 por ciento y 49 por ciento en comparación con los periodos de 2023 y 2019, respectivamente.

¿Por qué son tan usadas las motocicletas eléctricas Honey Whale?

“Las bicicletas eléctricas Honey Whale resuelven un problema de movilidad de poblaciones vulnerables como mujeres y personas de la tercera edad, por ello, es que son tan populares”, señaló a este medio Antonio Suárez Bonilla, académico de la Facultad de Arquitectura de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

No obstante, el Suárez indicó que estos vehículos se venden como bicicletas eléctricas y tienen pedales, pero no están hechos para que la gente pueda pedalear, el fabricante se los pone por cosmética y para que se puedan vender como bicicletas eléctricas.

“Legalmente hay una trampa porque son motocicletas disfrazadas de bicicletas. Tienen una velocidad donde pueden ir hasta 60 kilómetros y no se puede pedalear porque no están ergonómicamente hechas para pedalear”, añadió el especialista de la UNAM.

CDMX debe Regular Honey Whale antes que se vendan más motos

Suárez Bonilla subrayó que la regulación más sencilla sería el emplacamiento; no obstante, esto tendría muchos otros problemas porque en el momento en que se busque ponerles placas, se convertirían ”en un elemento de extorsión por parte de las autoridades”.

“Lo que hay que hacer es una regulación que no sea un emplacamiento, una opción es obligar a que la importación de estos vehículos tenga velocidad topada, que realmente, si se van a comportar como vehículos más cercanos a la bicicleta, que no rebasen entre 25 y 30 kilómetros por hora”, aseveró.

Además, agregó el académico,  desde las aduanas se debe detener a los vehículos que, teniendo pedales, no estén diseñados ergonómicamente para ser pedaleables. “Necesitamos un acercamiento con aduanas y la Comisión Nacional para el Uso Eficiente de la Energía para hacer un reglamento en el cual, estos vehículos, tengan estas características ergonómicas y de uso de baterías”, complementó.

Otro elemento que Suárez Bonilla  destacó para una posible regulación, es que solo puedan circular en vialidades secundarias o ciclovías confinadas. “Se requiere un diálogo entre academia,  el Gobierno de la CDMX y  el Gobierno federal; después, generar un acuerdo con los importadores”, puntualizó.