Son las cinco de la mañana en un conocido bar de after en Guadalajara cerca del primer cuadro de la ciudad.
La música a todo volumen retumba en las paredes del sitio donde decenas de visitantes bailan y siguen bebiendo. Afuera del baño tres hombres que parecen custodiar la entrada, se mantienen de pie con los brazos cruzados: parecen guardaespaldas.
“Una tachita güerito”, es la frase que cruzan con el primero que pasa a su lado. La compra venta obvia de drogas se da y la música no se apaga a pesar de que según autoridades del Ayuntamiento de Guadalajara, los establecimientos pueden cerrar máximo a las cuatro de la mañana.
Lo anterior depende del permiso, pero los antros, centros nocturnos y cabarets, deben cerrar a esa hora, según se indica en el Reglamento para el Funcionamiento de Giros Comerciales, Industriales y de Prestación de Servicios en el Municipio de Guadalajara.
La normativa no permite que los establecimientos se mantengan abiertos después de la hora señala, entonces, ¿cómo es que la fiesta sigue en estos sitios?
Aquella noche no se apareció ningún inspector, como en otros lugares que luego de anunciar la última ronda de tragos, los dueños obligan de manera enérgica a los comensales a abandonar el sitio.
“Tú no me vas a pagar la multa” son de las frases que dan los molestos dueños a los visitantes que buscan continuar la fiesta en el lugar.
Aun así, toda persona que visita la ciudad sabe de al menos uno o dos bares donde se puede prolongar la parranda hasta después de las cinco; la única explicación es la corrupción.
El Ayuntamiento de Guadalajara anunció en los últimos días que se despedirá a 105 empleados del área de Inspección y Vigilancia justamente por corrupción.
Aunque estos empleados laboraron sin ningún problema durante la administración del hoy gobernador de Jalisco Jorge Aristóteles Sandoval Díaz.
El domingo 31 de marzo, el clásico del futbol mexicano Chivas–América se vio ensombrecido por el ataque a dos bares del mismo dueño en Guadalajara, donde murieron seis personas.
A la fecha no se sabe con precisión el móvil, pero versiones extraoficiales apuntan a un atentado contra el propietario del Bar Clásico y el Bar Ruta 66.
Este evento se suma a una lista de varios en el sector del entretenimiento nocturno tapatío.
Porque aunque la autoridad trate de desdibujar la participación del crimen organizado, ya son varios los ejemplos que ponen en evidencia una realidad que se mantiene como secreto a voces en las áreas de seguridad del estado.
Los cobros de derecho de piso, las extorsiones para obligar a los dueños a vender droga en los baños, han orillado a algunos propietarios de estos establecimientos a traspasar sus negocios.
Aunque también existen indicios que apuntan a actividades ilícitas por parte de algunos propietarios de bares, en los ataques a centros nocturnos coincide la intervención del crimen organizado.
Al interior de la extinta Procuraduría del Estado, se tenía conocimiento de extorsiones tanto a dueños de bares como comerciantes.
Incluso, en comunicaciones emitidas por el grupo criminal de “Los Aliados” en el Blog del Narco el 25 de marzo pasado, se indicaba esta situación.
Los encapuchados del video indican que terminarán con el secuestro y la extorsión, males –que a su decir- son responsabilidad en el estado del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
A altas horas de la noche
En el Bar Lucrecia, propiedad de los hermanos Sánchez Garza, la fiesta no acaba temprano.
La música se prolonga hasta altas horas de la noche, prueba de ello fue el incidente que se dio alrededor de las cuatro de la mañana en dicho establecimiento.
Un sujeto realizó varias detonaciones contra el capitán de meseros, luego de que –según la versión oficial- el empleado no dejara entrar al individuo.
Pero conociendo los antecedentes del enriquecimiento de la familia Sánchez Garza y sus vinculaciones con grupos criminales desde los 80, se genera suspicacia sobre la veracidad de esa versión.
Independientemente de los motivos, el asunto de la violencia en los bares no parece ser de interés para el Ayuntamiento de Guadalajara, ni autoridades investigadoras del estado.
Y es que dicho bar, ubicado en la zona Providencia sobre Pablo Neruda a la vuelta de Barbaresco -otro establecimiento de la misma familia- las cosas operan con normalidad.
Lo anterior a pesar de que el propio reglamento del Ayuntamiento de Guadalajara, pone como máximo la hora en que se registró el incidente, las cuatro de la mañana.
Y aunque a la fecha no se sabe de denuncias presentadas formalmente por extorsión, son varios los incidentes reportados en los últimos años.
Existen indicios que los modelos de violencia en centros de esparcimiento que se han generado en ciudades como Monterrey, podrían repetirse en la Zona Metropolitana de Guadalajara, si la autoridad no toma cartas en el asunto.
Extorsión, venta de droga y lavado de dinero, son líneas de investigación que la vieja procuraduría dejó pendientes, la Fiscalía General del Estado tiene el reto de evitar que la violencia continúe en los sitios de esparcimiento.
Ataques a bares en la ZMG
3 de diciembre 2010 – Lydo’s Show Center en Zapopan; un muerto y 12 heridos por atentado con granada y armas de fuego calibre 9 milímetros.
16 de enero 2011 – Bar Vida Divina ubicado en avenida Vallarta fue atacado con una granada de fragmentación y armas de fuego, el saldo: dos muertos.
23 de enero 2011 – Bar “Mala Noche… No” en avenida Guadalupe, dos personas fueron heridas con arma de fuego.
12 de febrero 2011 – Butter Club en Guadalajara, una granada de fragmentación y tiros dejaron saldo de 37 heridos y seis muertos, de éstos últimos, cuatro venezolanos, un colombiano y un mexicano.
9 de marzo de 2013 – Bar Lucrecia en la colonia Providencia en Guadalajara, el capitán de meseros es asesinado por un individuo a las cuatro de mañana.
20 de marzo 2013 – Arrojan granada al bar Floggs en la Colonia Medrano en el cruce de calles Antonio Tello y Gigantes. No hubo explosión.
31 de marzo 2013 – El Clásico y Ruta 66 en la colonia San Andrés son atacados. El saldo 5 muertos y 17 heridos.
Lo que dice el reglamento
En el capitulo octavo “De la denuncia ciudadana”, en el artículo quinto transitorio se establece:
Quinto. En tanto el Consejo Municipal de Giros Restringidos no proponga los horarios para el funcionamiento de los giros en el municipio de Guadalajara, se aplicarán los siguientes:
I. Cantinas, pulquerías, cervecerías y centros botaneros: desde las 09:00 horas y hasta las 01:00 horas del día siguiente.
II. Vinos y licores, licorerías y depósitos de cerveza: desde las 06:00 horas y hasta las 01:00 horas del día siguiente.
III. Bar: desde las 06:00 horas hasta las 03:00 horas del día siguiente.
IV. Bar anexo a restaurante o a restaurante folklórico: desde las 06:00 horas hasta las 03:00 horas del día siguiente.
V. Bar o departamento de bebid as alcohólicas, anexo a hotel o motel: las 24 horas, únicamente para servicio a cuarto.
VI. Restaurante con venta de cerveza y bebidas alcohólicas de hasta 12° G. L.: de las 06:00 horas hasta las 01:00 horas del día siguiente.
VII. Cabarets y centros nocturnos: desde las 20:00 horas hasta las 04:00 horas del día siguiente.
VIII. Discotecas: desde las 18:00 horas hasta las 04:00 horas del día siguiente.
IX. Peñas: desde las 06:00 horas y hasta las 01:00 horas del día siguiente.
X. Abarrotes, tendejones, misceláneas con venta de cerveza en botella cerrada: desde las 06:00 horas hasta las 23:00 horas.
XI. Distribuidoras de vino o de cerveza en botella cerrada: de las 06:00 horas hasta las 21:00 horas.