La comisión ejecutiva del grupo de trabajo que apoyará al jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera Espinosa, se reunió en sesión privada por primera vez para presentar la metodología y ruta a seguir para la consolidación de la propuesta de Constitución de la Ciudad de México.
A la primera reunión oficial, de acuerdo con la publicación de la Gaceta Oficial, convocó sólo a seis de los 28 personajes seleccionados en el grupo de trabajo: Porfirio Muñoz Ledo; Miguel Barbosa Huerta, Alejandro Encinas Rodríguez, María Leoba Castañeda, Ana Laura Magaloni Kerpel y Rogelio Muñoz Toledo; además del Consejero Jurídico, Manuel Granados, en su calidad de secretario técnico.
Este último confirmó que dicha reunión, que se realizó en las instalaciones de la jefatura de Gobierno, busca poner a consideración de la Comisión Ejecutiva un plan de trabajo que luego será votado por los 28 integrantes del grupo.
El Gobierno de la Ciudad de México (GCM) arrancó así los trabajos que contemplan la gran convocatoria a ciudadanos, organizaciones políticas, sociales y civiles para la elaboración de la Constitución de la Ciudad de México.
Porfirio Muñoz, en su calidad de comisionado para la Reforma Política, en coordinación con Manuel Granados, serán los responsables de resguardar todas aquellas propuestas ciudadanas y de las organizaciones.
Iniciativa 5F17
De manera paralela a la Constitución de la Ciudad de México, cuatro de los personajes más influyentes convocados por Miguel Ángel Mancera, como Alejandro Encinas, Ifigenia Martínez, Porfirio Muñoz Ledo y Cuauhtémoc Cárdenas, promueven una propuesta ciudadana denominada 5F17, en alusión al 5 de febrero de 2017 que la Constitución Política Mexicana cumplirá 100 años.
El objetivo de dicha iniciativa es hacer coincidir en el 2017 una nueva Constitución Mexicana con la Constitución de la Ciudad de México a partir de una gran reforma al artículo 135 de la Carta Magna.
La 5F17 es una iniciativa ciudadana que busca que la Constitución Política Mexicana, que ha sufrido 697 modificaciones durante estos cien años, se transforme en una nueva Constitución.
“(La Constitución) ha dejado de ser una carta de derechos fundamentales, para atender los intereses y la ambición de una minoría privilegiada”, dijo Alejandro Encinas, uno de los promotores.
El documento que contiene la propuesta ciudadana para la reforma integral de la Constitución, señalada en el artículo 35 de la misma, refiere que el Congreso de la Unión, por el voto de las dos de las terceras partes de sus integrantes acuerde la integración de una Asamblea Constituyente, igual como se propone para la Ciudad de México.
La otra Asamblea
Entre ambas Asambleas Constituyentes, la de la Ciudad de México y la propuesta para la reforma de la Constitución federal, habría diferencias.
La nacional promueve la elección de 300 diputados constituyentes.
“La elección de la Asamblea Constituyente se realizará mediante una lista nacional, votada en una sola circunscripción electoral plurinominal, y la asignación de los diputados constituyentes se hará mediante una fórmula de proporcionalidad pura”.
Para ser constituyentes, se propone que sean ciudadanos mexicanos de 21 años cumplidos en adelante, estar inscrito en el padrón electoral y no estar en activo en el Ejército ni tener mando de policía cuando menos 70 días antes de la elección.
No ser secretario o subsecretario de Estado ni titular de alguno de los organismos de la administración pública; tampoco ser Ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación o miembro del Consejo de la Judicatura Federal.
En la larga lista de excluidos, excepto renuncien a sus cargos, aparecen magistrados, secretarios del Tribunal Electoral, consejero electoral local o distrital ni pertenecer al Servicio Profesional Electoral.
Tampoco ser legislador federal, diputado local, gobernador, jefe de Gobierno, presidente municipal o jefe delegacional, excepto se separen 70 días antes de la elección
Con ese discurso de conseguir una Constitución Política de México actualizada, los políticos de izquierda que forman el equipo de trabajo que apoyará a Mancera en conseguir la Constitución local, empujan la visión de redactar un documento modernos, accesible, pero sobre todo vigente a la altura de las problemáticas del siglo 21.
El mismo Porfirio Muñoz Ledo ha dicho que no se tiene una constitución verdadera, pues se vive de los despojos de la Constitución Federal, de la que emanan “leyes que se han pervertido, que tienen inmensas contradicciones y lagunas”.
El apoyo a este tipo de propuestas ciudadanas que los políticos de izquierda respaldan no se contrapone con el trabajo que realizan al interior del grupo que apoya a Mancera en la elaboración del documento para la Ciudad de México.
Está dentro de las funciones del decreto publicado en la Gaceta Oficial.
Aunque muchas de las reuniones que comenzarán a realizarse en el Gobierno de la Ciudad de México tienen el carácter privado, la administración local informará de los avances a través de una vocería o la propia dirección de Comunicación Social.