Aulas sin festejos
Diversos sectores magisteriales convocaron el día de hoy a una movilización masiva con miras a un paro nacional de labores de 72 horas, esto en exigencia de mayores garantías para la ejecución de su trabajo, mismas que siguen quedando pendientes en la agenda del país
Salvador VegaPor años, los maestros del país se han enfrentado contra la ineficiencia de políticas públicas que no ha contribuido a solucionar la brecha en materia educativa que enfrenta la nación.
La marginación, la falta de apoyos y el uso clientelar del magisterio para estímulo político siguen siendo la realidad a la que se enfrentan un millón 515 mil 526 docentes del sector educativo, registrados por el Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE) durante el pasado ciclo escolar.
Es por eso que el día de hoy, en el marco del Día del Maestro, los gremios más representativos de la educación decidieron salir a las calles para realizar un paro masivo de actividades de 72 horas. Esto con el objetivo de reivindicar sus derechos y exigir ajustes en el proyecto de Reforma Educativa que encabeza el régimen de la Cuarta Transformación.
“Nosotros hemos revisado –tanto la dirigencia nacional como nosotros los maestros de base– que esta reforma no tiene un cambio sustancial como los que se esperaba que se tuvieran a partir de las propuestas de campaña del presidente Andrés Manuel López Obrador”, expresó Horacio Gómez Pineda, integrante de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) y docente en el estado de Oaxaca.
En su consideración, la manifestación masiva convocada para el día de hoy a partir de las 9:00 horas –la cual tendrá mayor aforo en los estados de Oaxaca, Chiapas y Guerrero, así como en la Ciudad de México– se desarrollará pese a la voluntad que han mostrado algunos actores políticos a nivel nacional en materia por realizar cambios en el proyecto educativo, vigente aún, del sexenio de Enrique Peña Nieto.
Para el otrora integrante del comité ejecutivo sexenal –quien perteneció al periodo de administración de Rubén Núñez Ginez en la Sección 22– existen dos temas fundamentales para analizar la problemática de los maestros del país: los derechos laborales de los docentes como trabajadores y las políticas publicas en materia educativa que se tiene que llevar a cabo.
Siendo la mayor queja del gremio magisterial que los asuntos pertinentes al desarrollo de sus funciones quedaron inmersos en el conjunto de la Reforma Educativa y no en la Reforma Laboral, siendo considerados un ente alterno y con espacio para que sus derechos sean vulnerados.
“Nosotros como trabajadores de la educación no estamos considerados de manera plena en el artículo 123 constitucional, para nosotros los maestros se establece un estado de excepción, es decir: nosotros no somos considerados trabajadores como tal, sino considerados como servidores públicos o sociales”, señaló.
Carencias y rezagos
Sin embargo, en el aspecto de las políticas públicas para la mejora continua de la educación, existen fallas sustanciales que impiden que los 30 millones 909 mil 211 alumnos del sistema escolarizado obligatorio de la Federación, reciban una buena atención y enseñanza de calidad continua. Sobre todo en las regiones rurales del país.
“Los materiales que ocupamos dentro de las aulas son materiales caducos; que ya no están a la altura o a la vanguardia. Solamente en algunas instituciones en las zonas urbanas se les apoya con red de internet o algunos programas como Escuelas de Calidad; pero en las zonas rurales o marginales no existen estos programas que propicien el desarrollo pleno de los alumnos”, denunció el integrante de la CNTE en Oaxaca.
Por su parte, el coordinador educativo de México Evalúa, Marco Fernández, comentó que uno de los retos más grandes que se presentará durante la transformación de la política magisterial en el país es el rezago que presentan las escuelas normales, en donde el gobierno tendrá que comprometerse a invertir en la capacitación de los nuevos docentes, sin que eso signifique “ceder espacios a la gobernanza”.
“Al maestro se le debe reconocer su labor social, protegerlo y exigirle. Y una cosa no está peleada con la otra”, mencionó.
Para Marco Fernández, a pesar de que el magisterio sí tuvo una influencia importante para ejercer presión en la creación de la nueva Reforma Educativa, los resultados legislativos en efecto no fueron los prometidos en primer lugar, pues sólo se logró retomar una pequeña parte del proyecto original de la nueva administración.
“Es importante también mencionar que la propuesta del presidente se enriqueció de manera sustantiva con las observaciones que el colectivo Red Educación y Derechos hizo y que presentó a través de los partidos de oposición.
“Pero, si se observa objetivamente del proyecto original a lo que quedó aprobado, pues de la propuesta del presidente López Obrador sólo quedó el 30 por ciento”, acotó.
Por otra parte, el también coordinador anticorrupción del organismo evaluador, comentó que el diálogo entre el Gobierno federal y los representantes del sector educativo debe ser permanente, pero reiterando que no por ello se debe relegar la autoridad o permitir resquicios a través de los cuales se puedan filtrar prácticas perjudiciales.
“Yo creo que todo gobierno, cuando hace una Reforma Educativa, si no la hace de la mano de los maestros, no tiene mucho futuro. Pero eso no quiere decir que se haga aceptando la influencia en la gobernanza del sistema educativo del sindicato magisterial (SNTE).
“Si tú no logras convencer a los maestros o a la mayor parte de ellos de la importancia de un nuevo modelo educativo, (el proyecto) no va a jalar”, indicó.
El día de hoy, durante el arranque del paro nacional de 72 horas, se espera que se discutan otras problemáticas que enfrenta el gremio como la falta de reconocimiento a la labor que realizan, la profesionalización de la educación y las carencias en infraestructura para el desempeño de sus funciones.