Los procesos legales y administrativos ante las denuncias de acoso y violación en agravamiento de una mujer, entre otros temas de violencia de género, muchas veces se convierten en un motivo más de desesperanza para las víctimas.
Recientemente una estudiante de La Salle compartió su proceso de denuncia tanto en su escuela como en la Fiscalía de la Ciudad de México luego de ser víctima de violación por quien entonces era su mejor amigo.
Así fue el ineficiente proceso de denuncia por violación de esta estudiante
El 23 de septiembre de 2019, Michelle fue víctima de violación por parte de Iñaki “N”. Según el testimonio que compartió en sus redes sociales, la joven fue a casa de su entonces mejor amigo en busca de apoyo ante una situación de vulnerabilidad en la que ella se encontraba.
En consecuencia el acusado la recibió en su casa, no sin antes cambiar en repetidas ocasiones el punto de encuentro. Originalmente se encontrarían en la escuela, luego en un restaurante, y finalmente optó por su propio hogar.
A partir del testimonio se infiere que la joven recientemente había terminado su relación. Tras averiguar esto, Iñaki empezó a insinuarse. El joven insistió a Michelle a tener relaciones sexuales debido a que “no había motivo aparente” para negarse.
Al sentirse acorralada y sin mayor opción Michelle decidió ceder a la presión. Vale la pena apuntar que el consentimiento no existe cuando hay presión de por medio. Consecuentemente fue víctima de violencia sexual agravada por parte del acusado.
Inicialmente la joven se culpó a sí misma. Sin embargo con el apoyo de amistades y familiares decidió llevar a cabo un proceso de denuncia en la escuela contra Iñaki.
Originalmente expuso su caso únicamente en un tendedero. Sin embargo el joven señalado lo tomó con burla y la escuela no tomó cartas en el asunto.
Tras estos hechos Michelle procedió con una denuncia formal ante las autoridades de la escuela y posteriormente lo hizo también con la Fiscalía de la Ciudad de México.
Un largo y desgastante proceso
Lamentablemente la pandemia puso en pausa muchos de los trámites de la denuncia en contra de Iñaki. Durante ese tiempo todo el proceso quedó completamente detenido. No fue sino hasta 10 meses después que se llevaron a cabo las entrevistas y pruebas pertinentes.
Finalmente la fiscalía determinó que había elementos suficientes para llevar a cabo un proceso legal contra Iñaki “N”. Sin embargo, debido a la protección de menores de edad, las consecuencias para el joven fueron mínimas.
Cabe destacar que actualmente ambos implicados son mayores de edad. No obstante la ley se aplica al momento en el que ocurrió la violación, por lo que se lleva a cabo considerándoles a ambos como menores de edad.