Apuestan por dos ruedas
El pasado gobierno capitalino gastó 10 millones de pesos en un proyecto ciclista que nunca llevó a cabo y además recomendó a la actual administración construir 20 ciclovías más; ahora el reto es concluir los pendientes heredados ante los riesgos que provocan
Erick MirandaUno de los retos de la nueva administración de la Ciudad de México es concluir los proyectos ciclistas que el pasado gobierno perredista empezó pero no terminó.
Además de gastar 10 millones de pesos en la planeación de una infraestructura de 7 circuitos ciclistas que nunca se realizaron, la anterior gestión también presentó un mes antes de irse el Plan Bici CDMX, iniciativa coordinada por la UNAM y financiada por el Banco Interamericano de Desarrollo que sugiere la construcción de al menos 20 ciclovías en la capital.
Ahora, el desafío de las nuevas dependencias encargadas de la movilidad es analizar los proyectos pendientes dedicados a este medio de transporte y decidir si darles o no continuidad.
En relación a la infraestructura ciclista, Claudia Sheinbaum ha adelantado que su administración dispondrá de un presupuesto total de 100 millones de pesos para acrecentar y mejorar las ciclovías capitalinas, además de recursos especiales para generar una vinculación entre las vías confinadas y el transporte público.
Mientras tanto, los ciclistas capitalinos siguen padeciendo problemas en los espacios donde se habían proyectado las 7 ciclovías que nunca fueron construidas. En un recorrido por cuatro de los lugares donde estarían, Reporte Índigo constató los obstáculos que se encuentran los biciususarios en su camino.
En Paseo de la Reforma, en el ramal que corre entre las calles Lieja y Anatole France, las aceras de ambos lados son compartidas por personas que van a pie, en bicicleta, en scooters y hasta en motocicletas, situaciones que han ocasionado accidentes como choques entre los usuarios.
“La adaptación del tramo beneficiaría a todos, porque siempre se hace un relajo entre los peatones, los que usan los scooters, los que andamos en bici y hasta con los que van corriendo, sobre todo en las mañanas, porque es muy común que todos choquemos contra todos”, explica Greta Hernández, usuaria regular de la ciclovía Reforma.
Para la joven de 22 años, el riesgo y el caos que prevalece sobre el carril del Metrobús y en las banquetas de la también llamada Ciclovía Modelo, solo podría disminuir si se estableciera un único sentido y lugares de estacionamiento.
Sobre la avenida División del Norte, en el tramo que va de Río Churubusco hasta Insurgentes, distintas alternativas de movilidad se ven afectadas por innumerables rehabilitaciones a medias de las ciclovías. En algunas calles pueden encontrarse carriles pintados sobre la cinta asfáltica, en ocasiones de color blanco, rojo e incluso verde.
Los interesados suelen compartir las aceras y el carril de baja velocidad, sin embargo, es común que unidades de trasporte público invadan la zona o que autos permanezcan aparcados.
En la Ribera de San Cosme, en el tramo que va del Eje Central Lázaro Cárdenas hasta el Circuito Interior Melchor Ocampo, la posibilidad de una ciclovía se encuentra amenazada por la invasión de espacios ocupados por vendedores ambulantes.
Vehículos estacionados y carpas de comerciantes que sobresalen de las banquetas son los problemas más graves que persisten en la zona, además de la descarga y el traslado de mercancías que diableros realizan para el surtido de negocios.
La avenida Dr. José María Vértiz mantiene un tránsito constante debido a la amplitud de sus carriles, no obstante, por ello los automovilistas suelen manejar a altas velocidades y eso pone en riesgo la vida de quienes circulan por dicha vía.
Roberto Ponce, habitante de la colonia Doctores, asegura que la instalación de una ciclovía sobre Dr.Vértiz no sólo beneficiaria a ciclistas, sino también a peatones y conductores, ya que se trata de una arteria céntrica.
Las otras tres ciclovías inconclusas se ubican sobre Revolución, en su tramo de Ciudad Universitaria a Molinos; Eje 2 Poniente Gabriel Mancera/Monterrey en su intervalo de Universidad al Paseo de la Reforma; y, en Universidad, en el ramal concentrado entre el Eje 7 Sur Felix Cuevas al Eje Central Lázaro Cárdenas.
Riesgo diario
Los atropellamientos en la Ciudad de México son un riesgo constante para los ciclistas por falta de arterias dedicadas a ellos.
El pasado 6 de diciembre, un hombre fue arrollado en el cruce de Revolución y Calle 10, colonia San Pedro de los Pinos, en la alcaldía de Benito Juárez. Dado que el responsable huyó del sitio, la Procuraduría capitalina se mantiene investigando los hechos.
Durante el pasado 20 de noviembre, una usuaria de Ecobici fue atropellada en la intersección de Chapultepec y Cuauhtémoc, por un autobús perteneciente al IPN. El hecho fue condenado por servidores públicos y exfuncionarios del gobierno saliente.
Tips
Las cinco recomendaciones internacionales para mejorar la movilidad son:
- Seguridad pública
- Concientización de usuarios
- Establecimiento de reglamentos y leyes
- Infraestructura optima
- Servicio de atención en caso de siniestro
Mejoras pendientes
El hecho de que la movilidad sustentable en la ciudad despierte un mayor interés público no implica que todas las acciones realizadas traigan beneficios a los usuarios de la bicicleta, ya que aún falta mucho por mejorar y así poder hablar de un cambio verdadero, sostiene Areli Carreón, coordinadora de Política Pública de la asociación Bicitekas.
“Para que el Plan de Movilidad presentando por la actual administración (encabezada por Claudia Sheinbaum) dé resultados a corto plazo, el mismo debe apegarse a 5 recomendaciones internacionales consistentes en seguridad pública; concientización de usuarios; establecimiento de reglamentos y leyes; infraestructura optima; y servicio de atención en caso de siniestro”, dice.
Ante una creciente infraestructura ciclista, la experta en temas de movilidad dice que todas las propuestas deben ser analizadas, sean nuevas o no, “ya que a través de un mejoramiento de interconectividad así como de seguridad podrán prevenirse accidentes, porque no hacer nada no es una opción”.