El aumento a la tarifa de transporte urbano no es la única amenaza a la movilidad de los ciudadanos de Nuevo León. El Sistema de Transporte Colectivo Metrorrey presenta fallas técnicas por la adquisición de sujetadores Vossloh, es decir, piezas cuya función es que las vías queden fijadas al piso y no se desprendan al paso del tren.
En la Cuenta Pública por el Ejercicio 2017, la Auditoría Superior del Estado de Nuevo León señaló inconsistencias en estas adquisiciones para fijación directa en los rieles de la Línea 1. Los diputados del Congreso local pidieron un estudio en 2018. Pero ninguna autoridad estatal ha actuado
Por ello, el colectivo Únete Pueblo viajó a la Ciudad de México para pedir apoyo al Congreso de la Unión. Asimismo, la organización que encabeza Rocío Montalvo solicitó una auditoría financiera y peritajes en el Metro neoleonés a la Auditoría Superior de la Federación (ASF) y presentó una denuncia penal en la Fiscalía General de la República (FGR) para revisar licitaciones y contratos.
“Hemos agotado todas las instancias, entre ellas, la Auditoría Superior del Estado, la Fiscalía Anticorrupción y no tenemos soluciones. Estamos solicitando a la Cámara de Diputados y de Senadores que lleven nuestra voz y exijan a la Auditoría de la Federación que realice peritajes urgentes a la Línea 1 y 2 de Metrorrey, así como a la 3, debido a las diferentes fallas y actos de corrupción, como son unas piezas importantes”, señaló Montalvo desde el Senado de la República.
Los activistas realizaron un llamado a los tres senadores de Nuevo León: Indira Kempis y Samuel García de Movimiento Ciudadano y Víctor Fuentes del Partido Acción Nacional (PAN).
“Esto también es una advertencia. Si ocurre algún accidente a partir de esto sin que las autoridades se hagan responsables, que no digan que la ciudadanía no lo demandó, no lo exigió y que no estuvo aquí presente para señalar este problema con mucha claridad”, sentenció Kempis
Los diputados por Nuevo León, José Martín López Cisneros y Ernesto Alfonso Robledo Leal del PAN, Pedro Pablo Treviño del Partido Revolucionario Institucional (PRI) y Santiago González del Partido del Trabajo (PT), también recibieron a Únete Pueblo en San Lázaro.
“Nosotros desde esta Cámara y a través de la Auditoría Superior de la Federación vamos a solicitar que se investigue el uso de esos recursos y el destino que se les ha dado porque hemos estado en la Línea 1 con temas de riesgo para los usuarios y no queremos que ocurra una tragedia. El mensaje es muy sencillo, estamos unidas todas las bancadas por la seguridad del pueblo de Nuevo León”, dijo el petista Santiago González.
Empresas de sujetadores ‘pirata’
Las 7 mil 750 piezas adquiridas no cumplen con las especificaciones solicitadas y aun así Metrorrey compró más. Jesús Valdez, también integrante del colectivo Únete Pueblo, llevó a las Cámaras del Congreso un riel del Metro con el material correcto y el que no funciona.
“Los sujetadores presentan fallas técnicas, no cumplen con especificaciones y han ocasionado que se estén tronando. Hemos solicitado peritajes, se han instalado cerca de 5 mil. Todavía de que la empresa Vossloh no cumplió con las especificaciones, se le dio en diciembre de 2018 una nueva licitación, esto poniendo en riesgo que las vías del Metro lleguen a descarrilarse y los usuarios no tenemos garantizada nuestra seguridad”, pronunció la líder, Rocío Montalvo
El 11 de abril de 2017, el ingeniero José Arrambide Garza, entonces director general de Metrorrey, y José Eduardo Siller Aguirre, representante legal de Ferromuro Integral Internacional, firmaron un contrato para el suministro de sujetadores de fijación directa para vías de la Línea 1. El 13 de febrero de 2017 el Metro le adjudicó la licitación STCM-05-2017-DAF a esta firma.
Los suministros iniciaron el 11 de abril de 2017 y debían concluir el 8 de septiembre de 2017. Pero la Auditoría Superior de Nuevo León señaló un retraso en la entrega de las mercancías Vosshlo DFF 336 Crossover.
Entre otras inconsistencias, cinco de los 12 componentes que tienen las piezas no concuerdan con la descripción del producto que se debió entregar, por ejemplo: la firma alemana no indicó la tornillería requerida en el sistema de fijación ni justificó el cambio de los tornillos hexagonales y tuercas.
“Motivos por los cuales dicha propuesta debió ser desechada, acorde a lo establecido en los numerales 7.1. De la forma de presentación de propuestas, 7.4. De la elaboración y 9.3. Rechazo de proposiciones”, señaló la instancia.
En febrero, la auditoría realizó pruebas de 208 sujetadores en las estaciones San Bernabé y Talleres y descubrió una deficiencia de tres milímetros, lo que provoca que se abra la vía. Debían ser tornillos de grado ocho y no cinco, pero la firma Ferromuro colocó los sujetadores en lugar de cambiarlos.
“No se localizaron ni fueron exhibidos durante la auditoría, el certificado de garantía de 24 meses y la garantía de vida útil de por menos 20 años”, advirtió
Por si fuera poco, no se puede constatar el proceso de recepción de los sujetadores Vossloh. Metrorrey los adquirió y los embodegó un año, adjudicando en ese entonces la instalación a la firma francesa TSO-NGE México.
Precisamente esta empresa de origen francés ganó en diciembre de 2018 la licitación para la adquisición e instalación de 80 mil 541 sujetadores marca Vossloh, modelo 336 Crossover, por un monto de 12 millones 765 mil 341 dólares.
“Estamos solicitando peritajes en sujetadores, pero también que se cancele la licitación otorgada en diciembre de 2018, que es del mismo fabricante, Vossloh, pero con diferente intermediario”, dijo Montalvo.
Según Únete Pueblo, de los sujetadores adquiridos en 2017 aún están pendientes de colocar 3 mil por fallas en su geometría. Mientras que de los ya colocados, tan sólo entre 2018 y el primer trimestre de este año, 2 mil de esas piezas se desprendieron.