Valeria Hernández Guzmán, una joven de 22 años quien presuntamente se encuentra embarazada, habría sido ingresada contra su voluntad en un anexo por sus padres, sin que estos tuvieran un motivo para hacerlo, ya que los seres queridos de la mujer aseguran que ella no tiene adicciones.
El caso ha sido denunciado por diferentes colectivas feministas de Veracruz, amigas, vecinos, y compañeros del trabajo y escuela de la joven, ya que actualmente sigue privada de su libertad en el centro de rehabilitación.
¿Qué pasó con Valeria?
Las personas cercanas a Valeria indicaron que desde el pasado miércoles 12 de junio dejaron de tener contacto con la joven, lo que les pareció extraño, por lo que decidieron ir hasta su casa, en donde vecinos les informaron que la habían anexado en el centro “Nuevo comienzo”.
Por lo que decidieron acudir con las autoridades correspondientes para denunciar los hechos, ya que aseguran que Valeria no es una persona adicta a las drogas ni tiene problemas con el alcohol, como dicen sus padres.
“Valeria es una joven noble, empática, es una mujer inteligente, muy buena persona y amiga. Trabaja y también es estudiante con muy buenas calificaciones“, dijo una de sus amigas en un comunicado compartido por la Comunidad Feminista de Poza Rica.
Por su parte, la fundación “Casa de las mariposas malibran” aseguró que la joven, quien cursa sus estudios en la Universidad del Golfo de México (UGM), recibió un diploma por su promedio de excelencia.
La habrían anexado por su relación
A pesar de que la joven es mayor de edad, paga sus propios gastos, estudia y trabaja, los problemas con sus padres habrían iniciado por la relación que comenzó con un hombre, ya que ellos no están de acuerdo.
“Solo porque se quiere casar y está embarazada; ellos no aprueban al novio”, señaló la fundación “Casa de las mariposas malibran” en un comunicado sobre los motivos por los cuales llevaron a Valeria a un anexo.
Sus padres, quienes practican la religión adventista, supuestamente no le permiten tener un novio por sus creencias, además la fundación asegura que otro motivo por el cual se oponen al matrimonio es que ellos se benefician de su sueldo.
Aunque Valeria no es una persona alcohólica sus padres supuestamente lograron anexarla bajo este pretexto debido a que no le hicieron las pruebas adecuadas a la joven, además, las autoridades habrían determinado dejarla 3 meses en el centro de rehabilitación.
Por este motivo las colectivas dijeron estar “consternadas” con el comportamiento de la directora del Instituto Municipal de las Mujeres (IMM), ya que la funcionaria junto a los padres de Valeria “acudieron ante la fiscal Rosalinda Argumedo y determinaron privarla de la libertad”, aseguró la fundación “Casa de las mariposas”.
Exigen justicia por la joven
Ante esta situación, las diferentes colectivas feministas se han unido para exigir justicia por Valeria con el objetivo de que sea liberada del anexo e incluso realizaron una manifestación a las afueras del centro; sin embargo, Valeria continúa en este lugar.