AMLO y Petro piden cambiar enfoque de la guerra contra las drogas para evitar otro “genocidio”

En la Clausura de la Conferencia Latinoamericana y del Caribe sobre Drogas celebrada en Colombia, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), instó a los países latinoamericanos a unirse en el combate contra el consumo del fentanilo en Estados Unidos, calificándolo como una pandemia que requiere acción inmediata basada en la obligación moral y el humanismo.

Durante su participación, el mandatario mexicano destacó la importancia de dejar de lado las diferencias políticas e ideológicas en esta lucha y enfatizó el respeto al derecho a la vida.

Según sus palabras, aproximadamente 100 mil jóvenes pierden la vida cada año debido al consumo de fentanilo en Estados Unidos, lo que subraya la urgencia de abordar este problema de manera conjunta y compasiva.

Guerra contra las drogas ha sido un genocidio: Petro

Por otro lado, Gustavo Petro, presidente de Colombia, cuestionó la eficacia de la guerra tradicional contra las drogas impulsada por Estados Unidos en el pasado siglo, calificándola como un genocidio en los países latinoamericanos.

Petro argumentó que las políticas actuales sólo han llevado al encarecimiento de las drogas y al fortalecimiento de los llamados cárteles de la droga, causando daño a la población.

“Nuestro silencio estos 50 años ha sido cómplice en un genocidio en nuestro países porque eso es lo que ha provocado la política oficial de guerra contra la drogas en nuestra América Latina, un genocidio”, dijo.

Petro hizo un llamado a los países latinoamericanos a tomar posiciones sin temor y a hablar con su propia voz en lugar de repetir discursos impuestos por el poder mundial.

Propuso reducir la demanda de sustancias como una forma efectiva de combatir el narcotráfico y destacó la importancia del amor en la prevención del consumo de drogas, especialmente en sociedades impulsadas por la competencia y el éxito.

¿Qué es el fentanilo?

El fentanilo, un opioide sintético extremadamente potente utilizado en el tratamiento del dolor intenso, ha emergido como una preocupación en el mercado ilegal de drogas debido a su potencial mortal y riesgo de abuso.

Su uso seguro y supervisión médica son esenciales para prevenir consecuencias graves. La conferencia resalta la necesidad de educación sobre sus peligros y la promoción de prácticas seguras para proteger a las personas de sus efectos mortales.