De acuerdo con el politólogo Gustavo López Montiel, en un principio, cuando el presidente Andrés Manuel López Obrador deje su cargo al frente del Poder Ejecutivo, seguirá teniendo peso al interior del instituto y estará involucrando en las decisiones internas de Morena aunque esto no sea de manera pública, sin embargo, conforme el tiempo pase, la tarea se comenzará a complicar.
“Al principio sin duda se mantendrá involucrado, sin embargo, conforme pase el tiempo mantener el liderazgo y la unidad le será más difícil.
“Incluso actualmente, ya vemos que a los dos principales grupos dentro de Morena les cuesta mostrarse unidos, y me temo que conforme se acerquen las elecciones de 2024 esto se notará cada vez más debido a que todos buscan candidaturas, y en la medida en la que unos se impongan sobre otros esto impactará en la unidad al interior”.
De acuerdo con el especialista, aunque se modifiquen ciertas políticas, como la manera en la que actualmente se eligen a los abanderados que contenderán por puestos de elección popular, una de las situaciones que más molestia y polémica ha generado entre los militantes, no sería suficiente para solventar los problemas que enfrenta internamente el partido.
“Tal vez con esta idea que se ha planteado de elecciones primarias o elecciones previas permitiría a los grupos competir, sin embargo, también podría traer consecuencias, algo que ya vimos en el PRD: que después de competir, terminaban tan divididos que les era imposible organizarse en términos de estructura y como partido, lo que a su vez se vio reflejado en la pérdida de espacios de poder”.