El presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) negó que su Gobierno esté endureciendo la política migratoria luego de que su homólogo estadounidense Joe Biden publicó el nuevo decreto en materia de asilo. Insistiendo en que esta medida no afectará al comercio entre ambos países y que se busca garantizar los derechos humanos de las personas.
Durante su conferencia mañanera de este jueves, se le cuestionó sobre el operativo que la Guardia Nacional y el Instituto Nacional de Migración (INM) realizaron anoche en la plaza Giordano Bruno de la Ciudad de México. “Salió en el informe y no tenemos más”, respondió al rechazar que se haya realizado una deportación masiva.
Al respecto, el vocero presidencial Jesús Ramírez aseguró que el traslado de los migrantes que se encontraban en la plaza “fue voluntario y fue para regularización”. Señalando que fueron trasladados a las oficinas migratorias en los estados de México, Morelos e Hidalgo, a lo que López Obrador pidió que se rindiera un informe hoy mismo.
Decreto de Biden “es migratorio, no comercial”
En ese sentido, refrendó la postura que manifestó ayer al asegurar que no hay ningún acuerdo con Biden para que migrantes de origen centroamericano o caribeño sean deportados a territorio nacional. Si bien reconoció que países como Cuba o Venezuela aceptan deportaciones desde México, más no desde Estados Unidos.
“Aunque nosotros no quisiéramos que deportaran a nadie, porque la migración no es por gusto, es por necesidad. Pero ya como toman esas decisiones y es un Estado soberano, bueno, que los deportados lleguen de manera directa a sus países”, explicó López Obrador al argumentar que es lo mejor para sus derechos humanos.
El primer mandatario también reiteró que el decreto de Biden no cierra la frontera con México pues resultaría imposible ante la integración económica y social de la región. “Para aclararlo más: es migratorio, no es comercial, no tiene que ver con la gente de Tijuana que va y viene, es para lo que se conoce como migración irregular”.
