Al andar se hace partido y al volver la vista atrás, se ve la senda del PRD que nunca se ha de volver a pisar. Así, con la celebración ayer del Primer Congreso Nacional del Movimiento Regeneración Nacional (Morena) en la Ciudad de México, Andrés Manuel López Obrador rompe con su pasado, confirma “un nuevo comienzo”, y refrenda su decisión de convertir esta asociación civil en un partido político.
“Es un día trascendente porque inauguramos una etapa más en el propósito de lograr la transformación de México”, dijo el ex candidato presidencial de las izquierdas, en el Deportivo Plan Sexenal de la delegación Miguel Hidalgo, en el Distrito Federal.
Tanto es así, la decisión de no volver a pisar un camino trillado, que, tras 23 años de militancia, el diputado federal del PRD, Martí Bartres, renunció también ayer al partido para integrarse al movimiento.
Al mediodía, mil 676 delegados, de los 2 mil 580 que participaron en los congresos estatales, ya se habían registrado para la elección de los 204 integrantes que formarán parte del Consejo Nacional de Morena.
El político tabasqueño aseguró que “no existe línea a favor de nadie” y pidió una votación en completa libertad durante toda la ceremonia.
Los actos se celebraron ante la presencia del notario 47, Alfredo Morán, y de delegados provenientes de todos los estados de país, que tuvieron el derecho de votar y ser votados.
En el marco de este Congreso, además de elegir el Consejo Nacional, también se aprobaron los documentos básicos de Morena: declaración de principios, programa y estatutos.
Hoy está prevista una primera reunión con dos objetivos primordiales: elegir al Comité Ejecutivo Nacional y la Comisión de Honor Justicia, y aprobar un plan de acción.
Posteriormente, la mesa directiva del Congreso Nacional y del Consejo Nacional será designada por el Comité Ejecutivo Nacional.
El 9 de septiembre se realizaron 300 consejos distritales donde intervinieron 60 mil simpatizantes de la causa lopezobradorista. Ahí, el 86.2 por ciento de los participantes se pronunció por constituir a Morena en una fuerza partidista.
El más importante
“Vamos a la constitución del partido más importante de la historia de la izquierda mexicana”, dijo Raquel Sosa Elízaga, quien hizo un llamado a estar a la altura del reto.
Compartiendo el templete con los senadores Manuel Bartlett y Layda Sansores, Porfirio Muñoz Ledo, José Agustín Ortiz Pinchetti y Claudia Scheinbaum, entre otros, AMLO destacó el desafío que representa convertir Morena en un partido:
“Como sabemos, los partidos políticos no gozan de buena fama pública. Esto se debe a la campaña de desprestigio inducida por los que realmente mandan en el país, que se han lavado las manos en los partidos, en los legisladores y en los políticos, echándoles la culpa de la crisis de México, cuando en realidad son los responsables de la tragedia nacional”.
En el discurso pronunciado en la inauguración de este Congreso Nacional, López Obrador se mostró optimista: “millones de mexicanos nos apoyan y ven en Morena la esperanza ante la decadencia”.
Además, el tabasqueño dijo estar absolutamente seguro de que “cada vez habrá más gente con nosotros”.
A este respecto y refiriéndose a Martí Bartres, el presidente nacional del PRD, Jesús Zambrano, descartó que el abandono suponga una desbandada de legisladores y militantes perredistas hacia Morena.
Más aún, Zambrano saludó con sus “mejores deseos” que el Movimiento Regeneración Nacional “formalice sus trabajos y logre constituirse como partido político nacional”.
