Este 2019 se cumplen 31 años de que Andrés Manuel López Obrador (AMLO) dejó el Partido Revolucionario Institucional (PRI). Durante esa etapa ostentó varios cargos, incluso renunció a uno de ellos tan sólo 24 horas después de haberlo asumido. Después pasó por el PRD y fundó Morena, sin embargo, su formación política no se entendería si se excluye al tricolor de su vida.
Entre los argumentos más usados por los adversarios del tabasqueño, con el objetivo de descalificar su lucha en la oposición durante los gobiernos pasados, fue justo haber pertenecido al partido que más presidentes ha dado a nuestro país.
Andrés Manuel egresó de la Facultad de Ciencias Política y Sociales de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y decidió volver a Tabasco e incorporarse a la campaña del poeta Carlos Pellicer, quien buscaba ser senador de esta entidad sureña.
López Obrador llegó a Ciudad de México en 1973 para estudiar en la Máxima Casa de Estudios. Se alojaba en la Casa del Estudiante Tabasqueño, donde el gobierno de ese estado les ofrecía comida y hospedaje a ochenta jóvenes de escasos recursos económicos, según narró el propio presidente.
También fue en la capital mexicana donde tuvo contacto por vez primera con el poeta Carlos Pellicer y con Enrique González Pedrero, quien más tarde se convertiría en le Gobernador de Tabasco.
EL PRI
De acuerdo con la Dirección Federal de Seguridad (DFS), Andrés Manuel se afilió al PRI en 1976 y su primer cargo fue director del Centro de Estudios Políticos, Económicos y Sociales (CEPES), luego de que el poeta Pellicer obtuviera una curul en el Senado.
Fue en la misma época cuando el gobernador Leandro Rovirosa observó a López Obrador y le dio –a sus 24 años– la dirección regional del Instituto Nacional Indigenista, cargo que desempeñó de 1977 a 1982.
AMLO residía entonces en Nacajuca para desempeñar su puesto al frente de este instituto, en el cual se mantuvo durante cinco años. En ese tiempo, Enrique González Pedrero, antiguo profesor de Andrés Manuel, volvió a Tabasco, se convirtió en el gobernador, y un año después (1983) le ofreció a López Obrador la presidencia estatal del PRI.
Ya con el cargo sobre sus hombros, López Obrador intentó encabezar una renovación democrática dentro del PRI estatal, pero en su camino encontró varias resistencias que incluso lo llevaron a perder el puesto.
Sin embargo, el propio gobernador priista González Pedrero le ofreció el cargo de Oficial Mayor de Gobierno, pero López Obrador no quiso seguir y renunció –en menos de 24 horas– porque ese nuevo cargo lo alejaba de “servir los intereses mayoritarios de (su) pueblo”.
ADIOS AL PRI
Luego de dejar el cargo en Tabasco, decidió regresar al entonces Distrito Federal y asumió la Dirección de Promoción Social del Instituto Nacional del Consumidor, en 1984.
Más tarde, el exgobernador Graco Ramírez lo invitó a formar parte del Frente Democrático Nacional, un grupo disidente del PRI encabezado por Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano y el actual presidente de la Cámara de Diputados, Porfirio Muñoz Ledo.
La coalición de partidos de izquierda postularon a Cárdenas como candidato presidencial, (jornada electoral en la que se encontraría a Carlos Salinas de Gortari como adversario) y a López Obrador como candidato a la gubernatura de Tabasco.
“AMLO apoyó a Salinas en 1988”: Anaya (WTF???!)#AMLO apoyó a Cárdenas en 1988, en ese año era parte del FDN y fue su candidato a gobernador en Tabasco.#MentirasDeAnaya pic.twitter.com/S1VrmD4t8E
— Pablo José Hope (@oceloxochitl_) April 24, 2018
Durante la elección de 1988 en Tabasco, AMLO fue derrotado por el priista Salvador Neme Castillo. Sin embargo, luego de la consolidación del Frente Democrático Nacional y su eventual transformación al Partido de la Revolución Democrática (PRD), en 1989, fue designado presidente del Sol Azteca en este estado.
Más tarde el PRD lo eligió una vez más como candidato al Gobierno de Tabasco, pero en esta ocasión, Roberto Madrazo Pintado del PRI obtuvo el cargo, aunque Andrés Manuel denunció diversas irregularidades en el proceso.