El presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) consideró un timbre de orgullo la propuesta en el Congreso de Perú para declararlo persona non grata. Esto al volver a criticar la destitución de Pedro Castillo y la reciente decisión de permitir el ingreso de 700 soldados estadounidenses, medida que catalogó como intervencionismo.
“¿Cómo van a estar así? No es declarar non grato al Presidente de México. Para mí es hasta un timbre de orgullo me declaren non grato, pero no es correcto. De nuevo, mal asesorados y el Gobierno de Estados Unidos no debería abusar”, dijo López Obrador durante su conferencia mañanera de este lunes desde Palacio Nacional.
Esto ante la discusión de la propuesta que hizo el partido Avanza País para declararlo persona non grata por “sus reiteradas injerencias”, como ya se hizo contra el presidente colombiano Gustavo Petro, y denunciar el Estado mexicano ante La Haya por negarse a entregar la presidencia pro tempore de la Alianza Pacífico.
Para “darles más elementos” a los congresistas peruanos que votarán esta medida, López Obrador volvió a catalogar la destitución y detención de Pedro Castillo como “una decisión arbitraria, más la represión que desataron, asesinaron como a 70 personas que protestaban. Entonces yo no puedo quedarme callado”.
El presidente @lopezobrador_ reiteró la postura de @GobiernoMX respecto a la situación política de #Peru y la injusticia destitución del presidente @PedroCastilloTe @Notimex @Notimex_TV #AMLO #RedAMLO pic.twitter.com/LTZRpF9wYn
— Manuel Galeazzi (@ManuelGaleazz1R) May 22, 2023
López Obrador hace “llamado de atención” a EU por injerencismo en Perú
En ese sentido, también criticó la aprobación dada el pasado 19 de mayo para “que lleguen al Perú 700 soldados estadounidenses armados a petición de la que está detentando la presidencia y con autorización del Congreso del Perú. 700 soldados estadounidenses para entrenar a las Fuerzas Armadas del Perú y a la policía del Perú”.
Por tal, hizo “un llamado de atención al Gobierno de Estados Unidos porque eso es mantener una política injerencista que en nada ayuda a buscar la hermandad entre los pueblos del continente americano. En nada ayuda, es prepotencia, no tiene nada que ver con la política de buena vecindad”.
