Para superar las sanciones económicas impuestas por los líderes del G7: Reino Unido, Canadá, Francia, Alemania, Italia, Japón y Estados Unidos, Rusia tendrá que fortalecer sus alianzas con otros países como China, asegura el Mtro. Eduardo Palacios, miembro del Centro de Estudios de Países Post-soviéticos y del Centro de Estudios sobre Eurasia.
“China aquí será el pivote económico de Rusia, pero tiene que también consolidarse con Kazajstán, la India e Irán que es una potencia energética”, explica en entrevista el también, especialista en Relaciones Internacionales, Seguridad Internacional de la Federación Rusa y política internacional del espacio ex-soviético.
Palacios comenta que otro factor que le ha ayudado al Kremlin solventar estas penas por parte de los países occidentales es el boom del petróleo y el gas, ya que “tienen un fondo de ahorro que les ha permitido sobrellevar las sanciones”.
En cuanto al papel de China, el especialista en la materia dice que la alianza y apoyo entre el gobierno de Xi Jinping y Vladimir Putin es clara.
“Se ha formado de facto una alianza entre Rusia y China contra el bloque occidental que encabeza EEUU y eso es una realidad. Putin viajó a los juegos de invierno para garantizar el apoyo de su socio ante cualquier escenario y lo logró.
“China incluso ha declarado abiertamente que esta invasión es consecuencia de la incesante presión que EEUU a través de la OTAN ha estado ejerciendo contra la seguridad internacional de Rusia.
“Entonces esto demuestra que China sí ha tomado una postura clara, aunque definitivamente lo ha hecho a su manera, de forma muy pragmática, sin decir abiertamente que apoyan la invasión”.
Invasión ideológica, el pretexto de Rusia
Sobre los motivos que llevaron a Putin a invadir Ucrania, Augusto Reynaud, internacionalista del Colmex y Maestro en Ciencia Política y Gobierno por la Universidad de Tel Aviv, dice que se encuentra el miedo a que la ideología occidental permeé en su territorio.
“Putin ha justificado esta guerra argumentando que su seguridad se está viendo amenazada, ya que durante los últimos 20 años la OTAN se ha ampliado cada vez más hacia su territorio, y es cierto, regiones que antes pertenecían a la Unión Soviética como Lituania, Letonia, los países Bálticos, Hungría y República Checa se han unido a este grupo.
“Entonces el verdadero temor de Vladimir es que países cercanos a su nación se alíen con países de la OTAN y promuevan sus ideología. Pues si Ucrania comienza a democratizarse como lo ha venido haciendo y empieza a ser más próspero y libre, los rusos que son sus vecinos, sobre todos los jóvenes, se van a preguntar por qué ellos no, por qué ellos tienen que vivir con las restricciones y abusos implementados por el actual mandatario, lo que representa una amenaza no para Rusia, pero sí para el régimen de Putin que es un gobierno totalitario”.