La migración, los desplazamientos internos y la desaparición son algunas de las principales preocupaciones en este año como consecuencia de las altas tasas de violencia armada que se vive en México y en la región, ya que van en aumento, informó ayer el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) durante la presentación de su “Balance Humanitario 2021/2022”.
“La migración va en aumento y todos los debates que hay en torno a cómo enfrentar las consecuencias humanitarias, los peligros que las personas enfrentan a lo largo de la ruta migratoria, que son muchos y que van desde violencia sexual, hasta la desaparición y la mutilación por pérdida de una pierna o de un brazo”, señaló Jordi Raich, jefe de la Delegación Regional del CIRC para México y América Central.
Aunque dijo que no existen cifras concretas, aseguró que este fenómeno va al alza, sobre todo después de estos años de pandemia, en los que hubo cierres de fronteras y se experimentó una baja que ahora vuelve a crecer, en gran parte también, por la crisis económica de la contingencia sanitaria.
En segundo lugar, Raich señaló la desaparición como un problema actual, pues “los casos del pasado se suman a los del presente”.
Precisó que México posiblemente se ha convertido en el país de la región con el mayor número de personas desaparecidas y está a punto de alcanzar las 100 mil, de acuerdo con las cifras oficiales.
Otro tema es la violencia, que sumado a un cúmulo de otras vulnerabilidades —como la discriminación, la estigmatización y el cambio climático—, obliga a muchas personas a desplazarse de sus comunidades.
Finalmente mencionó a las personas privadas de su libertad, ya que una de las acciones de la delegación regional del CICR es visitar los centros de detención para hacer un monitoreo y un seguimiento de las condiciones, tanto físicas como psicológicas, de las personas encarceladas; y compartir informes con las autoridades penitenciarias.
Acciones urgentes para atender migración y desapariciones
Ante el contexto de violencia armada que se vive en México y en la región, mencionó que se requiere de la acción urgente de gobiernos, sociedad civil y organizaciones humanitarias para mitigar las consecuencias, promover más espacios humanitarios y una vida digna para las personas afectadas.
Al respecto, dijo Jordi Raich, el CICR brinda asistencia y protección a personas migrantes, desplazadas internas, familias de desaparecidos, personas privadas de su libertad y comunidades afectadas por la violencia.
“En términos globales de cifras, en el 2021 apoyamos de manera directa a más de 125 mil personas, insistía antes que las cifras son siempre muy relativas, porque ayudamos o hay cientos de miles de personas que se benefician de nuestras cifras de acción indirecta, la cual es mucho más difícil de calcular”, comentó.
