El rezago tecnológico de las alcaldías de la Ciudad de México cuesta millones de pesos cada año al erario público. Tan solo del 2018 al 2020, las 16 alcaldías gastaron más de 25 millones 521 mil 325 pesos en servicios de fotocopiado, es decir, un promedio de 8.5 millones de pesos anuales.
Así lo revelan las respuestas a las solicitudes de información tramitadas por Reporte Índigo con folio 92073921000235, 920740210000289, 9207412100020, 92074321000238, 92074221000093, 92074421000235, 92074621000179, 92074821000250, 92075121000165 y 92075221000150.
Las cinco alcaldías que más han invertido presupuesto público en replicar documentos durante los últimos tres años son Benito Juárez, Tlalpan, Gustavo A. Madero, Iztapalapa y Venustiano Carranza.
La alcaldía Benito Juárez es la que más ha gastado en fotocopias durante el lapso con un total de 9 millones 433 mil 596 pesos.
Después está Tlalpan, que en el mismo periodo erogó un total de 4 millones 678 mil 536 pesos.
Posteriormente, se encuentra Gustavo A. Madero que gastó 4 millones 067 mil 143 pesos en dicho fin de 2018 a 2021.
A su vez, Iztapalapa ocupa el cuarto lugar al gastar 2 millones 926 mil 008 pesos en copias durante el periodo.
Por último, entre las que más gastaron en fotocopias, está la alcaldía Venustiano Carranza que ha destinado 2 millones 031 mil 427 pesos.
Especialistas afirman que la digitalización del servicio público y el ahorro en papelería son un mandato constitucional local, por lo que el gasto realizado se debe auditar para verificar si se ha dado cumplimiento al marco normativo.
Niegan gasto
Las alcaldías Cuajimalpa y Coyoacán contestaron a las solicitudes realizadas que no han erogado de su presupuesto en fotocopias porque ese rubro está cubierto por contratos consolidados que firma el Gobierno central.
“Hago de su conocimiento que conforme a las funciones, facultades y atribuciones que tiene encomendadas esta alcaldía, no se tiene competencia referente al monto de fotocopiado e impresiones de Cuajimalpa de Morelos; toda vez que se tratan de contratos consolidados dependientes del Gobierno de la Ciudad de México”, detalla la respuesta de Cuajimalpa 092074221000093.
Mientras que Tláhuac, Xochimilco, Álvaro Obregón, Magdalena Contreras, Milpa Alta e Iztacalco no contestaron a las solicitudes tramitadas por Reporte Índigo desde el 29 de octubre y cuyo plazo para emitir respuesta venció el 11 de noviembre.
Alto costo
El atraso que existe en la modernización del servicio público es pagado con los recursos de la ciudadanía, comenta Sonia Juárez Moreno, especialista en Ciencias Políticas y académica de la Facultad de Estudios Superiores Aragón de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
“Es el costo que estamos pagando la ciudadanía por el rezago, que no se atendió y que apenas con la pandemia de COVID-19 se aceleró por la necesidad de hacer trabajo remoto”, comenta.
Juárez Moreno dice que el Gobierno de la Ciudad de México emprendió desde 2019 un proceso de transición tecnológica, ordenado por la Ley de Ciudadanía Digital, para hacer los trámites más ágiles y generar ahorros en papel.
Sin embargo, los montos erogados por las alcaldías revelan que este proceso es lento y se debe acelerar, considera la académica de la UNAM.
“Las alcaldías no estaban preparadas para digitalizarse. Actualmente hay un proceso, un ajuste, al que mucha gente se resiste, pero es lento (…) Vamos avanzando poco a poco, pero es necesaria esta idea del ahorro y de la digitalización”, declara.
Al respecto, los Lineamientos para la Implementación de la Llave CDMX de la Agencia Digital de Innovación Pública, publicados el 20 de enero de 2020, estipulan que la administración pública local debe digitalizar todos sus trámites de manera gradual y establecer los lineamientos para ello.
Mientras que la Ley de Austeridad y Transparencia en Remuneraciones de la ciudad afirma que en cada ejercicio presupuestal debe disminuir lo erogado en fotocopias en comparación con el anterior.
Gasto auditable
Lo invertido por las alcaldías en fotocopias es auditable porque las leyes son claras en que debe haber una reducción gradual en uso del papel y del gasto en fotocopias, comenta el especialista en derecho de la Universidad LaSalle, Marcos Pérez Esquer.
“Para saber si fue un gasto eficiente o no, habría que tener el resultado de una auditoría, para ver si fue razonable o no y estuvo acorde con la Ley”, indica.
También coincide en que debe avanzar aún más el proceso de digitalización del servicio público, no solo para gastar menos en copias, si no para que haya beneficios en general.
“Para que sean más ágiles los trámites, haya menos movilidad y gasto de tiempo es necesario que continúe y hay muchos campos de oportunidad”, refiere.