Advierte Conagua que no lloverá en NL; presas, en peligro

La Comisión Nacional del Agua (Conagua), en voz de su delegado en Nuevo León, Luis Carlos Alatorre, informó que no existen pronósticos de lluvia favorables para la entidad en los próximos meses, lo que supondría un duro golpe para el almacenamiento de las presas locales.

De acuerdo con el funcionario, para los meses de septiembre y octubre se espera una disminución de aproximadamente el 40 por ciento del volumen de lluvia que normalmente cae en la entidad, todo de acuerdo al Sistema Meteorológico Nacional.

En caso de presentarse tal escenario, las presas de la entidad, especialmente la de ‘La Boca‘, serían las principales afectadas, pues podrían secarse en un futuro cercano.

“En ‘Cerro Prieto’ ya se inició bombeo, pero esa agua y bombeo de 1.5 metros cúbicos por segundo nos pueden alcanzar hasta finales de octubre o principios de noviembre si no lloviera nada (…) ‘La Boca‘ de no presentar precipitaciones, y al ritmo de extracción que se está haciendo, en la primera quincena de septiembre la podríamos estar perdiendo”, admitió Alatorre.

En vista de la situación, el delegado de la Conagua aseguró que se trabaja ‘a marchas forzadas’ para instalar el equipo de bombeo en el ‘El Cuchillo 2‘, previsto para operar a mediados de septiembre.

Si no se presentan lluvias próximamente, tanto ‘La Boca‘ como ‘Cerro Prieto‘ necesitarían de equipo de extracción para continuar funcionando; de la misma forma, se prevé que, en caso de haber cortes en el suministro, estos empezarían en la zona sur de Monterrey.

Optimismo queda en el ‘olvido’

El momento hídrico que vive Nuevo León contrasta con el optimismo mostrado por el propio gobernador de Nuevo León, Samuel García, quien hace algunas semanas vaticinaba un verano de mucha lluvia para la entidad.

“Julio es un buen mes de lluvias que, aparte de agua, traerá mejores temperaturas; según la estadística meteorológica, julio es un buen mes y estamos esperando lluvia por encima de lo normal“, aseguraba el emecista el pasado 28 de junio, sin sospechar que tanto julio como agosto pasarían sin ‘aportar’ volumen hídrico a las presas.

Semanas después, ya con un panorama más ‘sombrío’, el titular de Agua y Drenaje de Monterrey, Juan Ignacio Barragán, aceptó que la esperanza depositada por el gobierno estatal en la abundancia de lluvia para el último tramo del año había sido un ‘error’, situación que reconoció en conferencia de prensa el pasado 16 de agosto.

“Yo asumo la responsabilidad de ser optimista; la verdad así lo veíamos, y sí, tenemos que rectificar y decir que nos equivocamos”, reconoció el director de la paraestatal.