Una adolescente de 15 años de edad y su familia fueron víctimas de un secuestro virtual en el municipio de Guadalupe, Nuevo León, donde los presuntos delincuentes intentaban obtener una cantidad de 300 mil pesos para la supuesta liberación.

La autoridad municipal informó que una familia solicitó el auxilio de los policías a quienes les indicaron que su hija había sido secuestrada tras obligarla a salir de su domicilio ubicado en la colonia Balcones de San Miguel y dirigirse a una tienda de autoservicio.

Al hacer la indagatoria, los afectados indicaron a los elementos que habían recibido una llamada de los delincuentes quienes les decían que la tenían privada de la libertad y para no hacerle nada y liberarla, debían pagar el rescate solicitado.

Tras investigar y gracias al GPS del teléfono celular de la menor, luego de dos horas, se logró ubicarla cuando estaba en una plaza pública, por lo que fue trasladada a su domicilio, donde fue entregada a sus familiares sana y salva.

Secuestran de manera virtual a joven en Apodaca

Una joven habitante del municipio de Apodaca, Nuevo León, fue víctima de un secuestro virtual en donde a su padre le pedían un rescate de 300 mil pesos para “liberarla”; la policía municipal logró poner a salvo a la afectada.

Los hechos se registraron en días pasados, según informó la autoridad, cuando la joven de 17 años recibió una llamada de parte de los “secuestradores” quienes le pidieron datos de su padre y ella respondió.

Posteriormente, los delincuentes virtuales la obligaron a salirse de su casa y trasladarse hasta una cafetería denominada ‘Tim Hortons’, ubicada en la Plaza Altea Huinalá, en donde le señalaron que debía esperar ahí hasta nuevas indicaciones o de lo contrario le harían daño a su padre.

En ese lapso, los “secuestradores” se comunicaron con el papá de la afectada a quien le dijeron que tenían a su hija y que debía darles 300 mil pesos en efectivo para no hacerle nada y liberarla; sin embargo, el hombre hizo caso omiso y colgó la llamada.

Asimismo, la menor intentó comunicarse con su papá, pero no tuvo éxito. Posteriormente llamó al 911 y denunció los hechos de los que estaba siendo víctima, dando la atención de inmediato.

Fueron los policías de Apodaca quienes acudieron hasta el sitio donde estaba la afectada, la resguardaron y lograron reunirla con su familia sana y salva.