Adiós, PRD: Comienza desalojo de oficinas y despido de trabajadores, ante pérdida de registro
Desde el domingo notificaron a unos 200 empleados que se presentaran para analizar su situación laboral ante la desaparición, a nivel nacional, del Sol Azteca
Carlos RamírezLa tarde de este lunes, el Partido de la Revolución Democrática (PRD) inició su desalojo de oficinas así como el proceso de liquidación de personal luego de no alcanzar el registro nacional como partido político ante el Instituto Nacional Electoral (INE).
Este desalojo se produce después que los propios líderes del PRD reconocieran que la vía legal para recuperar el registro es una batalla perdida; sin embargo, todavía impugnará los resultados en los 300 distritos locales.
El desalojo comenzó esta tarde en medio de la anticipación de un resultado desfavorable para el partido del Sol Azteca, pese a que se presente un juicio electoral en cada distrito.
Y es que el PRD no alcanzó el 3 por ciento de la votación nacional, por lo que conforme a la ley se llevó a cabo la respectiva liquidación.
Para ello, según miembros del PRD, se priorizará a los empleados operativos y, posteriormente, a los encargados de distintas Secretarías del propio partido.
Durante el desalojo se pudo ver a personal del PRD retirando sillas, computadoras y otros objetos personales; mientras que ahora los ex trabajadores deberán buscar nuevas oportunidades de empleo.
Fue en el 2006 cuando el partido alcanzó su pináculo pues ganó la primera Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México y varias gubernaturas tras ser creado el 5 de mayo de 1989.
Su decadencia también se produce luego que el Consejo General del INE rechazó por unanimidad la solicitud de realizar un tercer recuento de votos para verificar el total de votos que recibieron en las elecciones del pasado 2 de junio en México.
Ante esta medida el partido del Sol Azteca se encuentra en peligro de perder su registro al no cumplir con el 3 por ciento de votos que establece la Ley.
En la sesión realizada por el Consejo se estableció que si bien una de sus funciones es vigilar el adecuado funcionamiento de los órganos distritales, ni la Constitución ni la Ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales (LGIPE) dota de facultades al PRD para instruir a los Consejos Distritales para llevar a cabo un recuento de votos bajo ningún supuesto y en ninguna de las elecciones.