Acusan al secretario de Movilidad de la CDMX de favorecer al ‘Cártel del Transporte’
La Secretaría de Movilidad (Semovi) inició la implementación de un programa de chatarrización, sin anunciarlo abiertamente
Indigo StaffEl secretario de Movilidad de la Ciudad de México, Héctor Ulises García Nieto, fue acusado de realizar negocios ilícitos con el llamado líder del “Cártel del Transporte”, Fernando Ruano, a través de un esquema de bonos que permite la sustitución de autobuses viejos por nuevos, favoreciendo directamente a Ruano.
Según información que circula en redes sociales, la Secretaría de Movilidad (Semovi) inició la implementación de un programa de chatarrización, sin anunciarlo abiertamente, destinando 40 millones de pesos para este propósito. Las acusaciones señalan que las rutas bajo el control de Fernando Ruano recibieron beneficios por encima de otros concesionarios del transporte público, lo que generó sospechas sobre la equidad del programa.
Héctor Ulises García Nieto ha sido designado como Secretario de Movilidad 🚦. Licenciado en Economía, con estudios de maestría y doctorado en la UNAM, cuenta con una amplia experiencia en la administración pública, destacándose en la Secretaría de Transporte y Vialidad de la CDMX… pic.twitter.com/naJ8oRjyns
— Capital México (@CapitalMexico) August 19, 2024
En X (anteriormente Twitter), el usuario @transportistart17 cuestionó la relación entre García Nieto y Ruano, recordando que este último financió campañas políticas en apoyo de Santiago Taboada, ex candidato a la jefatura de Gobierno y contrincante de Clara Brugada. “¿Por qué se inició la chatarrización con este personaje?”, escribió en su publicación, que generó un amplio debate entre los internautas.
Las críticas contra García Nieto no se limitaron a su relación con Ruano, ya que varios usuarios también recordaron el historial del titular de Semovi como administrador general del Fideicomiso de la Central de Abasto de la Ciudad de México (CEDA).
En aquel entonces, García Nieto fue vinculado a presuntos actos de corrupción, cuando Mario Valdez Reyna, director ejecutivo de Normatividad de la Central de Abasto, presuntamente recibió un soborno de 200 mil pesos a cambio de autorizar algunas obras dentro de la CEDA.