Derivado de los últimos hechos violentos suscitados en Nuevo León, la nueva Fuerza Civil atribuyó los ataques a la contención a grupos del crimen organizado, que buscan llegar al estado a instalarse para la distribución de drogas o realizar actos delictivos.
El titular de la corporación estatal, Gerardo Escamilla Vargas, anunció que durante la semana se han registrado eventos donde policías se han enfrentado a balazos con integrantes de la delincuencia organizada, que han llegado a la entidad en camionetas.
Hechos violentos
- Miércoles: detención de un líder generador de violencia en el municipio de Sabinas Hidalgo, relacionado con delitos de asociación delictuosa, privación ilegal, entre otros.
- Jueves: autoridades detectaron a un grupo de personas a bordo de vehículos en el municipio de General Terán donde se desató una balacera, la cual dejó dos abatidos, así como autos, armas aseguradas.
- Viernes: balacera en Ciénega de Flores entre oficiales y delincuentes, la cual dejó como saldo tres abatidos y vehículos asegurados.
“Estas acciones coordinadas se hicieron entre los municipios de General Terán, el municipio de Montemorelos, aseguramientos también en el municipio de Linares y se contó con la participación de Fuerza Civil, Guardia Nacional y Sedena.
“Importante mencionar que en estas acciones no tuvimos nada con civiles, se garantizó la seguridad en las carreteras y desde entonces mantenemos un operativo permanente de vigilancia en la región citrícola, sin ninguna otra novedad sobresaliente”, dijo.
En el último evento tres uniformados de Fuerza Civil resultaron con lesiones de consideración al volcarse en la unidad en la que iban a bordo durante el operativo que se aplicó en el municipio de Ciénega de Flores.
Escamilla Vargas informó que los oficiales fueron trasladados de inmediato a un hospital de la localidad donde reciben atención medica especializada, pues dos de los heridos fueron reportados en estado crítico por contusiones craneales.
