El tema de los pseudoanarquistas y su financiación propició una investigación interna en el Gobierno del Distrito Federal.
¿Quién pagó las fianzas para que los detenidos durante la marcha del “Halconazo” del 10 de junio que se enfrentaron a policías y golpearon a un funcionario del gobierno local pudieran quedar en libertad?
La relación entre algunos pseudoanarquistas y personajes políticos afines al PT y PRD, como Gerardo Fernández Noroña, despierta sospechas.
A pesar de que el gobierno local les acusó de lesiones, daño en propiedad privada, ultrajes a la autoridad y ataques a la paz pública, la mayoría de los 23 detenidos burlaron de nueva cuenta a las autoridades. Las acusaciones se diluyeron y al final solo siete se mantuvieron en el Reclusorio Oriente.
El juez fijó una fianza de 171 mil pesos por cada uno de estos siete a fin de que pudieran llevar el proceso en libertad.
Si a través de sus perfiles se dicen jóvenes motivados por sus ideas revolucionarias, que buscan el cambio, y sin recursos económicos suficientes, la pregunta es: ¿de dónde salió el dinero para el pago de sus fianzas?
Fuego amigo
En las oficinas del antiguo Palacio del Ayuntamiento se maneja la hipótesis del “fuego amigo” ya que, en teoría, quienes apoyaron con dinero la colecta para el pago de las fianzas fueron los diputados federales del PRD: José Ángel Ávila, exsecretario de gobierno del DF y cercano a Marcelo Ebrard Casaubón, y Aleida Alavez Ruiz, del grupo de René Bejarano.
Los funcionarios consultados explican que se trata de una “revancha” contra el jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera, y sus colaboradores más cercanos.
La operación, explican, se habría gestado desde la oficina de Aleida Alavez, la exdiputada local del PRD, afín al líder de IDN, René Bejarano, a quien se señala como profundamente “antimancerista”.
El diputado federal José Ángel Ávila busca cobrarle a Mancera haber dejado en libertad a los presos del 1 de diciembre que fueron detenidos por el entonces jefe de Gobierno, Marcelo Ebrard Casaubón, tras los destrozos que los pseudoanarquistas ocasionaron en la recién remodelada Alameda Central.
En aquella ocasión, Miguel Ángel Mancera heredó el conflicto que tuvo que resolver durante los primeros días de gobierno.
El tema de los “presos de conciencia” pesó mucho y desde la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) se modificó el artículo 362 del Código Penal para despenalizar el delito de ataques a la paz pública.
Después de dicho cambio, los detenidos del 1 de diciembre quedaron libres bajo fianza. Por esta razón, mediáticamente Marcelo quedó como el gobernante represor y Mancera como el “solucionador”.
De ahí la supuesta revancha que motivaría a José Ángel Ávila a colaborar económicamente con la fianza.
Ahora que los supuestos anarquistas han vuelto a poner en jaque al gobierno capitalino al retener y golpear a Pedro Bello, director de Participación Ciudadana y Concertación Política, los alborotadores volvieron a burlar la ley.
¿Asalariados del PRD?
A partir de la investigación que el GDF realiza en torno a estos grupos y sus más activos y violentos manifestantes, se detectó que Jessie Alejandro Montaño Sánchez mantiene contacto con el exdiputado del PT y también fundador del PRD, Gerardo Fernández Noroña. Así lo demuestran algunas fotografías donde se les ve abrazados.
Además, a través de su cuenta de Facebook, Jessie Montaño se refiere al polémico político que también se ha enfrentado a los granaderos de la Secretaría de Seguridad Pública local (SSPDF) a las afueras del Senado de la República.
“Esta foto es sin el afán de ofender a mi compañero Jorge de Acampada Revolución, es sólo “un chascarrillo” si un día me dice que la borre, lo hago”. Jorge ya es más conocido como “El chota”, ya que Noroña dice que es policía, pero al menos yo pienso que no lo es, siempre nos apoya”, escribió el pasado 2 de octubre de 2012.
A lo que Montaño se refiere es a una foto en la que fueron captados enfrentándose a los granaderos a las afueras del Senado, la misma en la que Fernández Noroña convocó a manifestarse contra la reforma laboral y donde resultó lesionado de un ojo.
En su edición “Se busca a exmilitar”, Reporte Indigo publicó que el gobierno capitalino ubica a Jessie Montaño, quien acepta ser exsoldado y expolicía del Estado de México, como uno de los más violentos manifestantes ubicado por las cámaras y fotografías, a pesar de ocultar su rostro con máscaras y pañuelos.
Montaño no fue detenido el pasado 10 de junio durante la marcha del “Halconazo”, pero sí algunos de sus compañeros, entre ellos, una mujer, Luna Flores, relacionada con los grupos de activistas Frente Oriente y E5LN.
Este último realizó una marcha para protestar por los muertos de la guerra durante el sexenio de Felipe Calderón. En diversas fotografías aparece Luna Flores, cuyo rostro es ampliamente conocido entre la policía local como una de las más osadas manifestantes en la capital.
A través de las redes sociales, el grupo Frente Oriente dio a conocer del esfuerzo para recolectar todo el dinero a fin de pagar las fianzas de los siete detenidos del 10 de junio que fueron llevados al Reclusorio Oriente.
Para ello se utilizaron tres cuentas. La primera de Banco Azteca a nombre de Vidal Rojas; la segunda de Bancomer a nombre de Gustavo Yahir Chalico, abogado de la Asociación Nacional de Abogados Democráticos (ANAD), y la tercera de Banamex a nombre de Rosa Isela Martínez Martínez.
¿Verdaderos activistas o empleados a sueldo contratados para golpear a grupos políticos?