Autoridades del estado de Jalisco aseguran que, luego de las labores de rehabilitación en la Presa de San Onofre, en el municipio de Ayotlán, Jalisco, la calidad de sus aguas se ha recuperado, por lo que ya pueden desarrollarse actividades como la siembra de peces.
En noviembre de 2021, se registró una severa contingencia ambiental en dicho ecosistema a consecuencia de recibir deliberadamente los desechos contaminantes de una empresa industrial.
El Comité Estatal de Sanidad e Inocuidad Acuicola de Jalisco determinó entonces que el pescado procedente del embalse no era apta para el consumo humano debido a la descarga de vinanzas (agua residual generada tras la destilación del tequila).
La agencia The Associated Press reportó en aquel momento que pobladores denunciaron que un olor putrefacto impregnó la zona y las aguas del lugar se tiñeron de color negro.
“Aquí está, el agua totalmente negra ya con pocos seres vivos, la pestilencia de una Presa con la que en años atrás se regaban 700 hectáreas”
La Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader) de Jalisco informó que, debido a las mejoras de las condiciones medioambientales del lugar, en días recientes pudo efectuar la siembra de 200 mil crías de tilapia en el sitio.
“El acto fue presidido por la titular de la dependencia estatal, Ana Lucía Camacho Sevilla, quien afirmó que esta donación de peces pudo darse hasta que se tuvieran las condiciones propicias para la sobrevivencia de las crías”, señaló la Secretaría el 4 de octubre pasado.
El Gobierno municipal de Ayotlán, por su parte, dio a conocer algunas de las acciones que se han implementado en el embalse para desplazar las sustancias contaminantes que recibió y, de esta manera, restituir su equilibrio medioambiental.
“En apoyo a los pescadores de la Presa de San Onofre, sembramos 200 mil crías de mojarra tilapia para reactivar la economía de los pescadores y sus familias. Atendiendo la problemática de dicha Presa que se vio afectada y presentó mortandad de peces.
“Es por ello que se limpió, se colocaron aireadores y constantemente se realizaron estudios en el agua para revisar su calidad dando un resultado muy favorable para poder sembrar y criar la especie”, detallaron las autoridades.
Según la Sader, las crías de peces que fueron sembradas en la presa y que fueron obtenidas de su Centro Acuícola, permitirán la captura mensual de 40 toneladas de tilapia en el sitio por parte de los pescadores locales, una vez que las mismas hayan alcanzado su talla comercial.
Contingencia en el embalse de la Presa de San Onofre
El 3 de diciembre de 2021, unos días después de que se hiciera pública la contingencia ambiental de la Presa de San Onofre, el Gobierno estatal informó que ya había detectado con anterioridad la problemática en el lugar.
En aquella ocasión se informó de dos visitas previas realizadas por personal de la Procuraduría Estatal de Protección al Ambiente (Proepa) al sitio.
La primera verificación ocurrió el 23 de septiembre del 2021, “misma que derivó en una clausura parcial como medida de seguridad”.
El Gobierno estatal aseguró que, con base en el expediente de inspección que se emprendió ese día: “de configurarse las infracciones a la ley se determinarán las sanciones correspondientes, una vez que se desahoguen todas las etapas de dicho procedimiento”.
El 11 de octubre de 2021, se llevó a cabo la segunda visita de la Proepa, que contó con la participación de otras áreas con el objetivo de atender tanto a las autoridades municipales como a los pobladores y pescadores afectados.
El documento en el que se registraron las labores de inspección indica que los habitantes y trabajadores de la pesca atribuyeron la polución a una fábrica tequilera.
“Señalan a la empresa en cuestión como los causantes de las derramas de vinazas al citado cuerpo de agua”, precisa.
La contaminación del embalse se debió al derramamiento de vinanzas, líquido que se genera tras la destilación del tequila
La contingencia ambiental provocó que la empresa presuntamente responsable fuera clausurada totalmente por la Unidad Estatal de Protección Civil y Bomberos (UEPCyB) y por la Comisión Nacional del Agua (Conagua).
Impacto en derechos humanos
La contaminación de la Presa de San Onofre y las afectaciones que esto les trajo a los pescadores locales, ameritaron la intervención, en su momento, de la Comisión Estatal de los Derechos Humanos Jalisco (CEDHJ), la cual expidió una serie de medidas cautelares para distintas autoridades el 30 de noviembre de 2021.
Entre estas, se le solicitó a la Secretaría de Medio Ambiente y Desarrollo Territorial (Semadet) que verificara: “la existencia de autorizaciones en materia de impacto ambiental de las tequileras que se encuentran aguas arriba de la cuenca, que pudieran tener responsabilidad de las descargas”.
Mientras que a la Secretaría de Gestión Integral de Agua, en coordinación con las comisiones Estatal y Nacional del Agua, se les solicitó la realización de estudios de medición fisicoquímica del agua para conocer el impacto de las descargas en la demanda bioquímica de oxígeno.
Con sus medidas cautelares, la CEDHJ también les solicitó a las autoridades que procedieran por la vía penal para sancionar a los responsables de la contingencia ambiental en el embalse, y no únicamente por la vía administrativa.
“Se analice la posible materialización de delitos ambientales, y, de encontrarse elementos, se informe de manera inmediata al Ministerio Público para los efectos legales que correspondan y realizar las gestiones para la reparación del daño por parte de los responsables”, ordenó la Comisión.
El 3 de diciembre de 2021, el Gobierno de Jalisco afirmó que sí exploraría “otras vías jurídicas” para responder ante lo sucedido en Ayotlán y establecer las sanciones correspondientes.
Asimismo, aseguró que intensificaría sus labores de vigilancia en la región.
Tras una reunión entre autoridades estatales y municipales, detallaron que se tomaron acuerdos para el seguimiento de los procesos administrativos contra la empresa responsable de la problemática.
“Adicionalmente, se llevará a cabo un programa de inspección y vigilancia para garantizar el cumplimiento ambiental de giros potencialmente contaminantes como empresas procesadoras de cárnicos, tequileras, tenerías, entre otras”, precisaron.
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