Olivia López Arellano, secretaria de Salud de la Ciudad de México, dio a conocer este viernes que 17 niños se encuentran hospitalizados por COVID-19 en la capital del país; sin embargo, informó que ninguno de ellos tiene complicaciones graves y todos tienen un pronóstico de recuperación favorable.
Esto después de que la jefa de Gobierno de CDMX, Claudia Sheinbaum, afirmara que la ciudad se mantendrá en semáforo naranja por la pandemia de coronavirus y señaló que los contagios “van a la baja”.
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López Arellano señaló que la pandemia debe entenderse desde el ámbito mundial, nacional y local, los cuáles se desarrollan a ritmos diferentes, pero que todas afectan a los niños, aunque recalcó que en una menor medida en comparación a otros sectores de la población.
“Afortunadamente la fisiopatología de la enfermedad afecta mucho menos a los niños y a jóvenes, y se tienen casos, la mayoría asintomáticos, y se detectan porque se les hace una prueba rápida, pero afortunadamente no es un grupo que tenga un gran riesgo”, dijo.
Rgreso a clases presencial es un hecho a pesar de niños hospitalizados
Con respecto al regreso a clases, la funcionara expresó que el regreso a clases presenciales no disparará los contagios, pues el gobierno capitalino apuesta por un retorno seguro que promoverá las medidas de prevención tanto en alumnos como en profesores y demás participantes de las comunidades escolares.
“Entonces la apuesta es una escena segura en una condición favorable en términos de seguridad sanitaria, además muy necesaria, por lo que ya se ha mostrado de evidencia en términos de los efectos nocivos del largo periodo de clases no presenciales”, expuso.
López Arellano también afirmó que en casa los niños “no están resguardados de forma correcta, pues no respetan el aislamiento y se ven en las calles como si nada pasara.
“Los niños no están resguardados, los vemos en centros comerciales, espacios cerrados, espacios abiertos, de vacaciones, en tianguis, acompañando a los papás en los centros laborales”.
