Yoga contra la diabetes, la depresión y otros males

La actividad física contribuye a la prevención y gestión de enfermedades no transmisibles como las cardiovasculares, el cáncer y la diabetes. Además, reduce los síntomas de depresión, ansiedad y mejora las habilidades de razonamiento, aprendizaje y juicio
José Pablo Espíndola José Pablo Espíndola Publicado el
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Además del COVID-19, México enfrenta otra pandemia: la diabetes, ya que ocupa el noveno lugar entre las naciones con más personas con este padecimiento crónico y para 2025 se espera que ocupe el número siete.

En la lucha por controlar la diabetes, expertos en la materia recuerdan la importancia del ejercicio como uno de los tres pilares fundamentales.

“Recordemos que el estilo de vida saludable que para las personas con diabetes es el mismo que se recomienda para la población en general. Si bien el ejercicio es benéfico para todos siempre, para personas con esta enfermedad crónica es especialmente importante, ya que puede ayudar a evitar o retrasar la aparición de complicaciones”, explica Ana Segundo, educadora en diabetes de BD Ultra-Fine.

La especialista recomienda practicar yoga, actividad que ha ganado gran popularidad en la actualidad y que ha demostrado tener múltiples beneficios en la salud y bienestar de las personas con diabetes, al tratarse de una alternativa de wellness que integra cuerpo y mente.

Aunque cada esquema de tratamiento para cuidar la diabetes debe ser individual y personalizado para que sea efectivo, se recomienda en general a las personas que viven con este padecimiento la realización de al menos 150 min semanales de ejercicio aeróbico con una intensidad moderada, que puede ser acompañado de ejercicios de resistencia dos veces por semana.

Existen diversas variedades de tipos de yoga que se orientan más hacia la respiración, la concentración y la resistencia, por lo que ayudan a controlar el estrés. Pero también hay otros tipos que se enfocan más en los movimientos, pues el cambio de posturas y su mantenimiento exigen mayor fuerza e incrementan la flexibilidad, lo que contribuye a la relajación.

“Aunque ha ido incrementando la popularidad del yoga, también en su implementación como herramienta terapéutica para el cuidado de la diabetes, no debe sustituir los otros dos pilares fundamentales de la alimentación y tratamiento farmacológico. Deben ir los tres de la mano, uno sumando al otro, para alcanzar la meta de salud deseada y disfrutar de una buena calidad de vida”, agrega Segundo.

Además, indica que es importante llevar a cabo actividades físicas que disfrute el paciente, ya que si no es así, seguro se aburrirán y lo más probable es que las abandonen , cuando lo importante es combatir el sedentarismo de manera cotidiana.

“El yoga presenta muchas otras ventajas además de las relacionadas con la salud, como que puede ser practicada por casi cualquier persona, se puede hacer en casa, necesita pocos implementos o accesorios, es barato, es fácil de aprender, es seguro y hay muchas rutinas accesibles impartidas por coaches certificados”, concluye Segundo.

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