The
 Walkmen
 en vivo

Aclaración: The Walkmen es una de mis bandas favoritas de todos los tiempos.  

No tienen por qué saberlo pero estoy de vacaciones, razón insuficiente para no seguir grabando los #Popcasts. Y no sé ustedes, pero para mí, vacaciones es trasladarme a algún lugar fuera de mi ciudad para ver –con una buena cerveza en mano– a un grupo tocar en vivo.

Aclaración: The Walkmen es una de mis bandas favoritas de todos los tiempos.  

No tienen por qué saberlo pero estoy de vacaciones, razón insuficiente para no seguir grabando los #Popcasts. Y no sé ustedes, pero para mí, vacaciones es trasladarme a algún lugar fuera de mi ciudad para ver –con una buena cerveza en mano– a un grupo tocar en vivo.

Y eso es precisamente lo que vine a hacer a Austin, Texas. Con ésta, es la quinta vez que veo en vivo a The Walkmen: en tres ocasiones en un festival de música (dos en Austin City Limits y en el Primavera Sound Festival en Barcelona) y dos veces como parte de su gira en un lugar cerrado. 

Tal vez como señal de su creciente éxito, nunca me había tocado verlos de una posición “tan lejana”; y es que como buen fan, siempre pude acaparar la primera fila. Pero ahora, no pude colarme hasta adelante porque la gente abarrotó el Stubb’s BBQ de Austin. 

Para aquellos que tienen planeado ver a The Walkmen en vivo en el festival Corona Capital en la Ciudad de México, no duden en hacerlo. 

Con siete álbums bajo el brazo, la banda ha desarrollado uno de los sonidos más potentes y consistentes del indie rock en la última década. En su repertorio tienen desde el asfixiante desenfreno de “The Rat”, la creciente tensión de “All Hands And The Cook” (cuya versión en vivo es mil veces mejor que la del álbum, de esas canciones reinventadas en el escenario), hasta la sentida introspección de “The Blue Route”. 

Los gritos del vocalista Hamilton Leithauser nunca se habían escuchado tan entonados. El manejo de la audiencia también es notorio en su evolución; y no lo hacen con el típico recurso pop de preguntarle cosas a la audiencia, sino con recursos musicales.

La música de The Walkmen fue hecha para escucharse en vivo. Es un espectáculo ver a los cinco en el escenario; nadie sobresale por encima del otro, a pesar de los gritos de Hamilton, de tener a unos de los mejores bateristas en Matt Barrick y a un guitarrista espectacular como Paul Maroon. Esa misma noche también pude ver a Beach House en vivo, motivo suficiente para otro #Popcast. Mientras, me dirijo a Houston para ver en la noche a Fiona Apple después de haber sido arrestada en Texas por la Border Patrol. Ya les contaré.

Te puede interesar
POPCAST ‘Yeezuschrist Superstar’

"Yeezus”, como la religión, no es para todos.

La distorsión electro que abre el disco en “On sight” parece estar diseñada con un doble propósito: Tanto una barrera de entrada para los no-convencidos, como un recordatorio para los fans de que Kanye West está determinado a innovar su sonido una vez más. La canción esconde en un sample coral la sorpresiva manera en la que el rapero ha intentado operar en su exitosa carrera: “He’ll give us what we need / It may not Be what we want”.

POPCAST Café Tacvba: El objeto cabe en un cubo

En un concierto medianamente exitoso, se pueden ver caravanas de personas que llenan las inmediaciones del Auditorio Banamex en el Parque Fundidora de Monterrey. Pero en esta ocasión, el estacionamiento luce espacioso, se puede caminar sin problema por la explanada del inmueble y, en general, no se respira esa vibra de expectativa característico de un día de concierto normal. 

POPCAST La resurrección de Agnetha

Dos mil trece definitivamente ha sido el año de los regresos. Del couture pop de Justin Timberlake al misterioso David Bowie, y de los cascos de Daft Punk a los pedazos que aún quedan de Black Sabbath. Han sido tantos los regresos que no descarto que la segunda venida de Jesucristo se dé dentro de los próximos seis meses.

La artista más reciente en intentar regresar a sus glorias pasadas es la sueca 
Agnetha Fältskog.