Este domingo se dio a conocer que la conductora de televisión Verónica Gallardo fue hospitalizada después que en los primeros días de este mes se confirmó el fallecimiento de su esposo, el presentador de televisión Robert Alexander, ‘El gringo’.
La pérdida de su esposo
De acuerdo con los primeros reportes, la famosa reveló recientemente que tiene una deuda de más de 100 mil pesos debido a los gastos de hospitalización de su esposo.
Incluso, ella expresó que la muerte de su esposo fue rápida y repentina, pero explicó que se fue muy feliz: “Te amamos y siempre lo haremos”, escribió en su cuenta de Instagram.
“Ya descansa en paz el hombre que me hizo feliz durante 26 años“, añadió la conductora de televisión.
Hospitalizan a Verónica Gallardo
Por medio del canal de su sobrina, Diana Gallardo, se dio a conocer que Verónica fue hospitalizada de emergencia minutos después que iba a iniciar con su programa.
“Mi tía se puso mal”, explicó Diana quien añadió que su familia se empezó a sentir mal cuando ella y su hermana estaba en su casa.
“Se iba a desvanecer. Estábamos ahí; alcanzamos a agarrarla y mi primo Pato y su novia Mariana se la llevaron al hospital. Lo único que nos alcanzó a decir a mi hermana Sandra y a mí es que les avisáramos a ustedes que no iba a haber programa”, comentó.
“Ustedes saben que esto no es fácil, mi tía no la está pasando bien por todo lo que está pasando con lo de mi tío y el estrés que trae. Les agradezco por no dejarla y estar ahí”, añadió.
Verónica Gallardo habla
En un nuevo video titulado ‘Nada me derrumba’, Gallardo apareció en pijama desde su habitación para contar lo que había pasado. Aseguró que haría un video más corto que lo usual porque se sentía cansada y con sueño.
“Desde la mañana traía un fuerte dolor de cabeza; no le hice mucho caso, tomé más agua, no tomé nada para el dolor porque a raíz de lo de Robert ya no, porque a él le afectó mucho”, contó.
De acuerdo con la conductora, siempre lleva consigo su medicina en su bolsa, pero no se acordaba si había seguido tomándola tras la muerte de su esposo, lo que derivó en una presión arterial alta, por lo que la monitorearon unas horas después de estabilizarla.