Vende consoladores para sobrevivir; conoce la historia de Consuelo

Cassandra Sánchez Navarro y Catherine Siachoque hablan sobre su participación en ella nueva serie de ViX, Consuelo, una comedia situada en los años 50
José Pablo Espíndola José Pablo Espíndola Publicado el
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Son los años 50, en la Ciudad de México y Consuelo (Cassandra Sánchez Navarro) tiene que darle un giro drástico a su vida. En medio de una sociedad muy conservadora, la mujer, quien es madre de tres hijos, tendrá que ponerse a vender consoladores.

Consuelo pertenece a la alta sociedad de la capital mexicana; sin embargo, su marido la abandona, así que busca la manera de salir adelante junto a sus hijos. De eso va la nueva serie de ViX, Consuelo, un proyecto que por medio de la comedia lanza una crítica social muy fuerte.

Cassandra cuenta que el proyecto le llegó hace casi cuatro años. Lo primero que pensó fue que era un sueño, ya que como actriz podría experimentar lo que fue vivir en los años 50 con un nivel socioeconómico alto y muy glamuroso.

“Todo era muy maravilloso e increíble y después de todo, el mundo se le cae abajo (a su personaje) y empieza a vender consoladores a la alta sociedad en México y se vuelve toda una revolución sexual al mismo tiempo que el voto. Yo decía, esto está increíble; o sea, esto es un sueño, a ver si Dios quiere”, cuenta la actriz; sin embargo, pasaron varios años hasta que el proyecto se hizo.

Si bien Sánchez Navarro describe la experiencia como haber ido a Disneyland, por la historia y el elenco que la ayudaría contarla, confiesa que sí tuvo dudas de protagonizar esta historia, ya que hasta entonces solo había interpretado a muchachas jóvenes, máximo de 27 años.

“Yo había querido ser Consuelo y de repente algo en el guión cambió y en vez de tener dos hijos iba a tener tres, el más grande de 18 años. ¿Cómo iba a tener yo un hijo de esa edad?”, se preguntó la actriz.

Así que siguió el consejo de su abuelo: “Hay que preguntarle a todo el mundo y al final hacer lo que se te hinche el…”, y así lo hizo. Se acercó con gente que admiraba y respetaba, desde directores, productores y hasta actores, porque no la quería “cagar”, dañar su carrera.

“Todos los proyectos que había hecho hasta ahorita habían sido de niñas de menos de 25, 26, máximo 27, y todos me dijeron: ‘no lo hagas’. Al final del día hablé con mi intuición de qué es lo que yo quiero, sin que nadie más me hubiera dicho nada, qué es lo que yo hubiera dicho, yo hubiera dicho que sí, no lo hubiera pensado dos veces, ok, hago entonces de una mujer que es más grande que yo, que tiene tres hijos, que pertenece a época que era normal tener hijos de esa edad; entonces, yo lo puedo hacer”, relata.

A partir de Consuelo, Cassandra se asume como una mujer más segura consigo misma, porque no tomó la decisión a base de presión o de lo que le dijeron los demás.

El poder del cambio

En Consuelo, la actriz Catherine Siachoque interpreta a Olga Pontón de Acevedo, la villana de esta historia. Ella es la mejor amiga de Consuelo y una mujer líder de Polanco. Es inescrupulosa, llena de frustraciones y dolor contenido que enarbola las banderas de la moral y que siente una absurda y autoimpuesta responsabilidad por mantener las denominadas buenas costumbres.

“Nunca me imaginé que cuando hiciera una serie de los 50, mi personaje iba a querer ser como una mujer de los 40, con esa rigurosidad y personalidad que tiene Olga en la historia. Además, cuando supe que Cassandra sería Consuelo supe que tenía que estar y también.

“Te puedo decir con el corazón en la mano que habiendo terminado la serie, te diría con mayor ahínco que si antes me gusta ahora la adoro y si admiraba a Casandra antes, ahora la recontra admiro más”, comparte.

Ambas actrices concuerdan en que tienen un gran proyecto entre las manos que dará mucho de qué hablar y que la gente va a disfrutar, porque no hay nada parecido en ninguna plataforma, “hecho con tanta calidad, con tanta crítica, pero con humor, con belleza, buenas actuaciones y buena dirección”.

Las dos esperan que Consuelo inspire mujeres, como lo hizo con ellas; por ejemplo, Cassandra siempre soñó con tener un negocio un poco más divertido y esa vivencia la tuve con Consuelo.

“Es un es algo muy divertido ser empresaria, es algo muy divertido y liberador tener tu propio dinero. Entonces, creo que todas esas nuevas libertades por las que estaban empezando a vivir las mujeres, justo le tocó a Consuelo como el principio.

“Me encanta que ahora las mujeres pueden tener la libertad de irse a divorciar si quieren y nadie les dirá dejadas. 

“Yo no conozco a una mujer que no sea echada para adelante en lo que haga, aunque lo haga mal, pero mínimo está saliendo adelante y no conozco ninguna que sea como tirada al piso, huevona, no, todas trabajan, todas tienen hijos, todos salen adelante, todos dan lo mejor de sí”
Cassandra Sánchez NavarroActriz

“Creo que han llegado muy lejos las mujeres en estos 70 años desde que se grabó la serie hasta ahorita y todavía nos falta mucho por lograr, pero es muy poquito tiempo para tan rápido lo que hemos avanzado”, argumenta.

Saben que a las mujeres aún les falta mucho por lograr, pero les encanta pensar que esta serie, chance, y es el empujoncito que alguien necesitaba para tener negocio, para autodescubrirse o para “mandar a la chingada una relación tóxica”.

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