Como si de un portal a otra dimensión se tratara. Observadores de auroras boreales se llevaron una sorpresa al mirar los cielos de Alaska. Una espiral color azul celeste apareció entre las luces celestes durante algunos minutos.
¿Sí era un portal a otra dimensión? ¿Una invasión extraterrestre? ¿Una ruptura en la continuidad espacio-tiempo? No. La respuesta es en realidad algo mucho más simple que cualquiera de las ideas previamente mencionadas.
El fenómeno visual se derivó del exceso de combustible expulsado por un cohete de SpaceX que horas antes fue lanzado desde California.
¿Por qué se formó una espiral en el cielo de Alaska?
A veces los cohetes tienen combustible que necesita ser expulsado, explicó el físico espacial Don Hampton, profesor adjunto en el Instituto Geofísico de la Universidad de Alaska en Fairbanks.
“Cuando hacen eso a una gran altitud, el combustible se convierte en hielo”, compartió. “Y si resulta que está a la luz del sol, cuando estás en la oscuridad en el suelo, puedes verlo como una especie de gran nube, y a veces se arremolina”, agregó.
Si bien no se trata de un fenómeno habitual, tampoco es extremadamente raro. El propio físico dijo que ha visto este tipo de eventos al menos tres.
La imagen del remolino se captó con la cámara panorámica del Instituto Geofísico. Posteriormente se mostró en video en cámara rápida que se viralizó en redes sociales.
#SpaceX launched a Falcon 9 rocket from California. It carried the mission known as Transporter-7. When the rocket’s discarded upper stage passed over Alaska, it vented its unused fuel. A bit of spin turned the harmless cloud into a spectacular spiral.
© University of Alaska. pic.twitter.com/CheIytimxB
— Girl In Space (@ExploreCosmos_) April 16, 2023
También otros fotógrafos que asistieron a observar la aurora boreal compartieron sus propias fotografías en redes sociales.
¿Cómo se forman las auroras boreales?
El nombre de aurora boreal se remonta a 1619, cuando Galileo Galilei las bautizó de esta manera en honor a Aurora, diosa romana del amanecer. “Boreal” hace referencia a Bóreas, deidad griega asociada al viento del norte.
Se trata de un fenómeno atmosférico que se manifiesta con luces naturales en el cielo. Los colores más típicos son azul, rojo, amarillo, verde y naranja. Pueden verse en las regiones polares bajas.
Las auroras se forman como consecuencia de la interacción del viento solar con el campo magnético de la Tierra.
Los iones del Sol que logran atravesar la magnetósfera quedan atrapados en la ionosfera. Posteriormente comienzan a chocar con partículas de oxígeno y nitrógeno. Este hecho libera energía en forma de luz. Es así como podemos observar las auroras boreales.