Después de la época de Navidad, los niños no son los únicos que obtuvieron regalos y obsequios, México también se quedó con las manos llenas ya que la industria de los juguetes se ha vuelto un incentivo para la economía del país durante los últimos años.
La Asociación Mexicana de la Industria del Juguete (Amiju) señaló que el año pasado la industria de los juguetes en México exportó casi mil 600 millones de dólares (mdd) a Estados Unidos, Canadá y Centroamérica. En 2013 se registraron mil 580 mdd.
Y es que en los últimos cinco años las ventas de juguetes en México han aumentado 6.0 por ciento en términos de valor. Para hacerse una idea, tan solo en el 2015 se podrían alcanzar los 2 mil 400 millones de dólares (cuando se haga el cierre este mes), según datos emitidos por la consultora Euromonitor.
Miguel Ángel Martín González, presidente de la Amiju, dijo a SinEmbargo que “este 2016 es un año que marca una tendencia y que va marcando cómo las posibilidades siguen abriéndose en la industria del juguete. Tenemos inversiones muy importantes tanto de empresas mexicanas que llevan 50 o 60 años como es el caso de Mi Alegría y de empresas trasnacionales como Hasbro, Mattel y Lego”.
Martín González señaló a La Jornada que, en el país, la industria de los juguetes tiene gran oportunidad al estar muy cerca de Estados Unidos, país que “acapara 25 mil de los 85 mil millones de dólares que se consumen a nivel global en juguetes cada año”.
“En México podemos enviar mercancías en 48 horas a Estados Unidos vía terrestre, mientras que un cargamento de Asia puede tardar hasta 40 días”, puntualizó Miguel Ángel Martín González.
Euromonitor agregó que el mercado comprendido por carritos, muñecas y demás aumentó 13 por ciento en el 2014, y uno de los factores primordiales de este crecimiento es el auge de los videojuegos y sus consolas.
“Exhiben una considerable elasticidad de la demanda en relación con el crecimiento del PIB. Por lo tanto, como resultado de un mayor crecimiento del PIB en el año 2014, los consumidores gastaron más en ambos juegos, juguetes tradicionales y juegos de video”, indicó la consultora.
Las marcas Mattel y Hasbro dominan el 40 por ciento del sector y la que más ha crecido es Lego, cuya producción se ha expandido con sus tradicionales bloques y con nuevas propuestas como videojuegos.
“(…) Mattel exporta carros montables que se hacen en México y tenemos también otra compañía muy importante que ha invertido 500 millones de dólares en los últimos años que es Lego”, dijo el presidente de la Amiju.
“Tenemos una buena calidad, logísticamente somos más eficientes y más rápidos que los chinos, y eso, aunado con las políticas de la Secretaría de Economía, se ha podido seguir trabajando”, puntualizó.
Aunque el crecimiento de este sector es destacable para la economía del país, lo cierto es que también afecta la producción de índole nacional, pues los juguetes artesanales solamente representan el 2 por ciento del mercado.
¿El mayor exportador del mundo?
De acuerdo a Forbes, en 35 años la República Mexicana tendría las ventas de exportación de 1.9 billones de dólares. En 2014, las exportaciones totales del país fueron de 397 mil 535 millones de dólares, según datos reportados por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
Un estudio realizado por HSBC y Oxford Economics indicó que para el 2050 México será el sexto exportador más grande a nivel mundial, incluyendo distintas industrias, no solo la de los juguetes.
Forbes añadió que para ese año “habrá más reducciones en el costo de embarques y carga aérea, impulsadas por una combinación de naves con contenedores más grandes y la expansión de corredores oceánicos”.
Hágalos usted mismo
La cultura y tendencia del DIY (o Hágalo Usted Mismo, en inglés) no es nueva, sobre todo en países como Estados Unidos y algunos de Europa. En México cada vez es más común y la industria de los juguetes no es la excepción.
De hecho, se espera que a la par del crecimiento de la producción y exportación de juguetes en México también se incremente la cantidad de productos hechos por los propios consumidores: los niños.
Esto con mayor ímpetu en los sectores de ingeniería, robótica e innovación, pues este 2016 ya inclusive marcas como Fisher-Price lanzaron juguetes que enseñan a los niños a programar.
Así, los pequeños mexicanos sabrán “ensamblar” robots con los que podrán jugar después, “pero ya no el robot clásico que conocemos, que le aprietas un botón y avanza o se va para atrás. Ahora son robots colaborativos o de asistencia que uno puede programa, dirigir, armar y ensamblar”, dijo Miguel Ángel Martín González.