Tuvieron que pasar cuatro años desde su última película, “Mr. Nobody”, para que Jared Leto se enamorara de un nuevo guión. Y vaya que el amor rindió frutos.
Por su interpretación de una prostituta transgénero, Rayon en la película “Dallas buyers club”, recibió el SAG Award y el Globo de Oro como Mejor Actor de Reparto. Y las apuestas predicen que repetirá la victoria en los Oscares el próximo 2 de marzo.
Desde el 2000, cuando apareció en tres películas, entre ellas la icónica “Requiem for a dream”, se le había visto en pantalla una vez por año, hasta que en el 2009 se detuvo para dedicarse a su otro amor: la música.
En verano del año pasado, habló en entrevista exclusiva para Reporte Indigo sobre “Love Lust Faith + Dreams”, el álbum más reciente con la banda que fundó, 30 seconds to Mars, y dijo que con esa producción se obtuvo como resultado “algo muy especial y estoy ansioso de que todo el mundo lo escuche”.
Y ha logrado mucho más que ser escuchado por miles. De hecho, el sencillo “Up in the air” de esta producción ha ido más allá de la Tierra, pues en febrero del 2013 fue enviado en una misión de carga hacia la Estación Espacial Internacional, donde ha permanecido desde entonces.
En los próximos días la banda se presentará en Monterrey, Zapopan y la Ciudad de México.
Pero ni la fama ni el éxito rotundo han logrado despegar de la Tierra los pies del actor que comenzó su carrera en “My so called life”, en 1994.
Aclamado por los críticos, idolatrado por sus fanáticos y nominado a numerosas estatuillas, su vida no se define por estas celebraciones.
“La banda y sus fans siempre han sido los rechazados”, expresó Leto en una entrevista del 2011 con el sitio Web Kerrang, “en mi vida nunca fui popular, ni estuve en el grupo cool”.
Si Jared obtiene la codiciada estatuilla, esa declaración dejará de ser realidad.