El Diccionario de los cuidados hecho por la a Red de Cuidados en México y Oxfam

Así como todas las personas necesitan cuidados, todas deberían aprender a cuidar. Un primer paso en este proceso puede ser construir un lenguaje común de definiciones.

Con este propósito surge el Diccionario de los cuidados, una publicación digital de la Red de Cuidados en México y Oxfam. El libro contiene 28 conceptos así como ligas para acceder a recursos en línea y profundizar en estos.

“La Red de Cuidados es una organización que está integrada por personas que se enfocan en sus investigaciones, en su vida cotidiana, a los cuidados. Es decir, hay académicas y hay cuidadoras, es una red multiactor. Nos hacen una invitación a colaborar con Oxfam, a través de la doctora Edith Pacheco y la maestra Mónica Orozco, en la elaboración de un documento que pueda ofrecer elementos base para despegar la conversación y dar difusión al tema”, explica Laura Ríos Quiroz en entrevista con Reporte Índigo. 

En el prólogo, Alexandra Haas Paciuc, directora ejecutiva de Oxfam México, afirma que debería sorprender que este sea un proyecto del siglo XXI cuando los cuidados son labores que han sostenido la vida desde siempre.

“Quizá la razón de ello es, precisamente, que se asume que los cuidados se dan naturalmente”, sostiene Haas.

Sin embargo, la pandemia de COVID-19 evidenció que los cuidados son un trabajo y tienen un costo. La red de la que forma parte Ríos Quiroz y Oxfam México, un movimiento global que trabaja en 70 países para poner fin a la injusticia de la pobreza y acabar con la desigualdad, comenzaron este diccionario en el contexto de la contingencia sanitaria.

“La pandemia sirvió como detonador de la importancia del trabajo de cuidados. Es muy importante diferenciarlo del trabajo doméstico, que se refiere a la preparación de alimentos, lavado, aseo del hogar, precondiciones para el cuidado. Y el trabajo de cuidados implica una cercanía física con quien estamos cuidando y el desarrollo de relaciones emocionales entre quien los brinda y los recibe”, puntualiza.

Definir conceptos como persona cuidadora y persona cuidada fue parte de una selección en la que algunas palabras quedaron fuera.

“Al momento que dijimos ‘a ver, vamos a hacer una lista de los conceptos que necesitamos abordar, que consideramos necesarios’. Salieron como 67 pero no había cabida para tantos, entonces tuvimos que hacer una selección. Los elegidos los consideramos trascendentes para comenzar a colocar los temas en todos los espacios y abrir conversaciones”, cuenta. 

Un enfoque feminista y de género en el Diccionario de los cuidados

Los cuidados son, en su mayoría, realizados por mujeres y niñas. La feminización de las labores que sostienen la vida perpetúa las desigualdades de género, por lo que el diccionario plantea hacerlas en comunidad y corresponsabilidad.

“Los cuidados no son privativos ni de cierto sexo ni de cierta edad, todas las personas podemos hacerlo porque son algo con lo que definitivamente no se nace, no tienes el instito materno de cuidar”, señala Laura Ríos Quiroz, integrante de la Red de Cuidados en México.

Quienes resultan más afectadas por esta carga desproporcionada de trabajo de cuidados son las mujeres. De acuerdo con la Encuesta Nacional Sobre el Uso del Tiempo (ENUT) 2019, ellas dedican 40 horas a la semana a actividades no remuneradas, a las cuales se suman 38 horas semanales que dedican al empleo pagado. Los hombres, en cambio, sólo dedican 15 horas de la semana a las tareas del hogar y 48 horas al mercado laboral.

 Para la Red de Cuidados en México, los cuatro actores que deben participar del cuidado son el Estado, la familia, la sociedad y el mercado laboral y de servicios.

“En ese sentido, también es importante mirar más allá y darnos cuenta de que la responsabilidad no es únicamente de la sociedad, también el Estado tiene su parte importante como garante de los derechos. El sector privado y la sociedad civil organizada también pueden aportar”, expresa.

Las tareas de cuidados que realizan de forma gratuita las personas en México, y mayoritariamente las mujeres, representan 5.5 billones de pesos, es decir, 23.5 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) nacional, según estimó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) en 2018.

“Los cuidados son trabajo, no es una cuestión de amor, o por obligación porque soy mujer o niña, implican tiempo y desgaste no sólo físico, sino emocional y limitan las posibilidades de ejercicio de otros derechos. Tenemos pendiente la aprobación en el Senado de la reforma constitucional para la creación de un Sistema Nacional de Cuidados (SNC) y su respectiva ley”, afirma Ríos Quiroz.

En el contexto de la contingencia sanitaria, la Cámara de Diputados aprobó una reforma constitucional para la creación del SNC. Pero la iniciativa se encuentra detenida en el Senado de la República.

Desde el Diccionario de los cuidados, la propuesta es un sistema integral basado en los principios de universalidad, accesibilidad, asequibilidad, pertinencia, suficiencia y calidad con prioridad en infancias, personas con discapacidad o enfermedad y personas mayores. Esto incluye la prestación de servicios de guarderías, escuelas de horario ampliado y centros de cuidado diurno, de rehabilitación, asilos, servicios domiciliarios y de trabajadoras del hogar, aseguramiento y protección.

El Diccionario de los cuidados está disponible en: https://oxfammexico.org/wp-content/uploads/2022/06/DICCIONARIO-DE- CUIDADOS.pdf

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