El triunfo del candidato republicano, ahora presidente electo, Donald Trump, en las elecciones por la Casa Blanca no deja de sorprender. Pero más allá de esa victoria, asombra también la derrota de la demócrata Hillary Clinton.
Y es que la exprimera dama contaba con un séquito de reconocidos cantantes y demás influyentes de Hollywood que parecía podrían inclinar la balanza a su favor, pero que finalmente, como casi todo en el mundo del espectáculo, fue una ilusión.
Estas elecciones fueron históricas, no sólo por cómo manejaron ambos candidatos sus campañas sino por que el mundo del espectáculo participó de manera activa y constante desde que iniciaran en 2015 los actos de proselitismo.
Celebridades de Hollywood, la televisión, el modelaje y hasta el deporte apoyaron a la candidata por el Partido Demócrata. Sin embargo, aunque su esfuerzo fue constante e incondicional resultó insuficiente para que Clinton lograra llegar a la silla presidencial.
Y aunque con menos luces, el republicano también contó con el apoyo de personajes de gran peso dentro del showbussiness como el actor Mike Tayson o Tom Brady. Y aún así logró ganar. ¿Qué le falló a Hillary?
Razones por las que fracasó
El escenario que se desenvuelve ahora va en contra de todos los pronósticos de expertos y encuestas, las cuales proyectaban el éxito de Hillary. Muchos se preguntan ¿qué fue lo que sucedió?, ¿qué fue lo que estuvo mal?
La respuesta va quedando cada vez más clara: el voto oculto y la ruptura entre la sociedad y la política son los grandes protagonistas de esta historia presidencial.
Estas elecciones evidencian el cambio que pedían los estadounidenses. Clinton ofrecía más de lo mismo pero Trump, que echó por tierra todos los pronósticos, propuso una fractura del sistema que a su juicio agobiaba al país. Ganó por su promesa de devolverles la estabilidad económica y seguridad social con la construcción de un muro en la frontera con México y la prohibición de la entrada a refugiados.
Además Hillary no fue una candidata que inspirara confianza, y los ciudadanos estadounidenses conocieron su política belicista mientras fue secretaria de Estado, aunado al conocimiento de cómo fue EU cuando su esposo Bill Clinton era presidente.
Estos factores ayudan a entender por qué se ha dado la derrota en las filas del Partido Demócrata pues Clinton no lograba encajar a la perfección con los votantes millennials ni tampoco con las mujeres, ya que muchos la definían como “una persona fría, formada a la vieja escuela”. Incluso expertos afirmaron durante su campaña que “le hacía falta más simpatía y más gestos de calidez”.
Y aunque Hillary estuvo rodeada -o apoyada- por celebridades influyentes de Hollywood o la música, como Katy Perry, Madonna, Lady Gaga o Leonardo DiCaprio, quienes incluso son destacados mienbros de organismos como la ONU, poco importó pues los ciudadanos la percibían como poco transparente y cuestionaron su estrategia para manejar la Secretaría de Estado y la Fundación Clinton, por lo que se quedó detrás de su contrincante.
El hartazgo social gana en las urnas
Hillary Clinton rompió con todas las previsiones. Daniel Ureña, presidente de The Hispanic Council, realizó un análisis de las elecciones y concluyó que el voto oculto fue uno de los principales factores de su derrota, así como el escándalo de los correos.
“Sus discursos siempre fueron los mismos y también deshonesta con el escándalo de los correos. El hecho de que la Oficina Federal de Investigaciones (FBI, por sus siglas en inglés) anunciara la reapertura de la investigación de sus correos electrónicos el 28 de octubre y que dos días antes de las elecciones descartara presentar cargos, también influyó en los votantes”, afirmó.
El “voto oculto” es algo que los expertos llaman la teoría de la “espiral del silencio”, la cual explica que “cuando socialmente una opinión es rechazada, aquellos que la comparten prefieren no hacerla pública”. Y este es el caso perfecto para ejemplificarlo.
Otro de los factores de la derrota de Clinton es la ruptura social y política que se vive no sólo en Estados Unidos, sino en todo el mundo, y se ha demostrado en las urnas. Ejemplos claros de esto son los resultados del Brexit, que se pronosticaba ganaría el “no” a la ruptura de Reino Unido de la
Unión Europea, o el “no” al acuerdo de paz entre Colombia y las FARC luego de alrededor de 50
años en guerra.
Por lo tanto, la conclusión a la que se llega es que sin importar cuántas personalidades del mundo artístico o del deporte estuvieron apoyando a Clinton, el descontento oculto de la sociedad estadounidense se hizo presente y dio el pase al republicano que hablaba sin tapujos, se mostraba como el candidato del cambio, el candidato anti-establishment que traerá un aire nuevo en la dirección del país. Incluso su lema de “Juntos somos más fuertes” fracasó ante el de Trump
“Hagamos Estados Unidos grande de nuevo”.
Lloran estrellas
Las reacciones en las redes sociales no se hicieron esperar, desde los lugares más inesperados del planeta surgieron comentarios en Twitter, donde conocidos rostros de Hollywood, del mundo de la música y los deportes compartieron la decepción que supone para ellos el resultado electoral. Desde las cantantes Katy Perry y Madonna, defensoras de Hillary Clinton, hasta el director Michael Moore, que ya había vaticinado en julio la victoria de Trump.
Lady Gaga fue vista llorando mientras esperaba anunciar el triunfo de Clinton, lo mismo que la cantante Cher.
Perry fue una de las más activas en Twitter con mensajes como “nunca seremos silenciados”, “la revolución apenas comienza” o “el poder de la gente”.
La cantante Cher, que se encontraba esperando en el comando de Hillary Clinton para festejar su posible triunfo, mostró su descontento en la misma red “I am not ok” y abandonó el sitio a las 03:00 de la madrugada del día de ayer.
Ellen DeGeneres, quien es una influyente de la televisión norteamericana, dedicó un emotivo mensaje para Hillary: “Sin importar cómo termine esta noche, estoy muy orgullosa de ti y me siento muy honrada de ser tu amiga”.
Otro que se mostró desconsolado fue Chris Evans, protagonista de “Capitán América”: “Esta es una noche vergonzosa para Estados Unidos. Hemos dejado que un difusor del odio conduzca a nuestra gran nación. Hemos dejado que un matón establezca nuestro curso. Estoy devastado”.
Mientras que de este lado del futuro muro, si es que Trump mantiene su promesa de campaña de construirlo, el actor mexicano Gael García Bernal publicó: “Construyan su pinche pared. La historia se hará cargo del plan fallido pa que México pague. Y para abrir los agujeros que siempre habrá”.
Y así, por cientos, brotaron los comentarios a lo largo de la noche, la madrugada y la mañana de ayer y no sólo de estrellas, sino de la sociedad en general, e incluso quienes no cuentan con raíces estadounidenses.
Las predicciones
A inicios de este año, en el mes de enero, la famosa Mhoni vidente predijo que la candidata por el Partido Demócrata Hillary Clinton sería la gran vencedora el día de las elecciones presidenciales, pero se equivocó. Los que sí han adivinado han sido Los Simpson.
La familia más famosa de la televisión no es la primera vez que acierta en sus predicciones, hace no mucho causaron alboroto con la noticia del Nobel de Literatura al cantante Bob Dylan, ya que en uno de sus capítulos habían hecho posible que el astro del rock se hiciera con tal honor.
Pareciera que su creador, Matt Groening, es quien tiene la mejor bola de cristal del universo pues ya van más de 20 situaciones o hechos históricos en los que aciertan.
Algunos aciertos
La divertida familia amarilla se ha adelantado a ciertos sucesos:
• Los alimentos que la central nuclear de Springfield alteró por la radiación en 1999 se han convertido en algo muy real después de la crisis de Fukushima.
• En un capítulo de 2008 se hablaba de los errores en las votaciones presidenciales de Estados Unidos y de la victoria de Obama.
• En 1995 mostraron un futuro novio de Lisa, quien utilizaría su reloj para comunicarse con ella de forma inalámbrica.
• En 1994 ya pudimos ver cómo se utilizaba carne de caballo para elaborar comidas industriales aunque la gente no fuese consciente de ello.
• En 1994 ya se intuía que Apple iba a ser un gigante de la tecnología con quien se podría interactuar con pantallas táctiles.