La audiencia esperó expectante. Durante este viernes la Feria Internacional del Libro de Guadalajara se convirtió en un campo de batalla para los fans de la serie más épica que la televisión estadounidense ha dado al mundo en los últimos años.
Armados con libros, los fans de George R. R. Martin se instalaron desde tempranas horas para poder tener la oportunidad de ver al autor de la saga Canción de hielo y fuego, en la cual está basada la afamada serie Games of Thrones.
No eran los más de siete millones de espectadores que disfrutaron de la épica Batalla de los bastardos, pero sí más de dos mil 500 personas que se apersonaron en una batalla por conocer al ídolo de la ficción literaria y televisiva.
La batalla que vendría a culminar con los gritos y aplausos para George R.R. Martin en la FIL inició meses antes, cuando dos mil 500 personas se inscribieron a través de una página que la editorial Penguin Random House proporcionó para tener un mayor control de los asistentes.
Como la espera de la séptima temporada, miles de personas aguardaron a que abrieran las puertas del Foro FIL, lugar en dónde solo son presentados los eventos musicales masivos del magno evento literario de la región.
La gente entraba saltando de la emoción, con una sonrisa en el rostro y un libro entre las manos que había sido comprado en los abarrotados pasillos de la editorial Penguin Random House. Era el efecto del autor, quien desde meses antes había anunciado su visita con un “nos vemos en Guadalajara”.
Un cúmulo de emociones se concentró en los miles de asistentes, a pesar del tono grisáceo de las nubes de Guadalajara, el sol salió para los fans al ver subir al escenario a George R.R. Martin pero más cuando al finalizar su presentación firmó el libro de uno de sus admiradores.
El chico levantó el libro y el autor lo recibió como un gesto de agradecimiento, lo firmó y se lo entregó. Los gritos y los aplausos no faltaron, la cámara enfocó al espectador mientras la emoción se disparaba en las lagrimas de alegría por la codiciada firma.
George R.R. Martin decidió dedicarse a la escritura de historias desde muy pequeño, cuando supo que no podía ser Batman, como confesó la tarde de este viernes, ya que el autor siempre ha sido fan de los comics y la falta de millones o fuerza superior lo llevaron a pensar que no podría ser Batman sino un escritor que actualmente supera la fama del héroe de DC Comics.
¿Quién merece el trono?, le preguntaron a Martin a través de papeletas depositadas en una urna. Definitivamente el trono de la noche fue para él. Sin embargo su reflexión fue en sentido contrario al reconocimiento meritorio de su literatura pues para él el trono es de quien tiene poder.
“No sé si merecer sea una palabra operativa. El trono no es de quien lo merece sino de quien tiene el poder”, explicó a sus fans.
Aunque también señaló que el trono, en el ideario real, debe superar al poder del dinero que se ejerce hoy en día y un trono debe ser visto como un puesto público que está supeditado a los intereses de toda la gente por estar mejor.
Sin embargo no tuvo empacho en responder que Tyrion Lannister, uno de los personajes más importantes de la serie, podría ser un líder contemporáneo por su inteligencia, capacidad y experiencia política, aunque no sea un líder carismático o muy amado por sus súbditos.
Y es que los personajes de la serie se han vuelto centrales en la vida de los fans y en las discusiones al respecto. Tal es su importancia que George R.R. Martin señaló que sus ideas sobre la historia comenzaron a surgir en los noventas cuando trabajaba en Hollywood y decidió iniciar una novela de ciencia ficción.
Destacando Martin que eran en realidad sus personajes quienes le susurraban para escribiera sobre ellos el origen de esas historias que este viernes conmovieron a miles de personas en el público.
Sin embargo, a pesar de los distintos personajes y los entramados que supone la trama de Canción de hielo y fuego, el autor afirmó que no tiene dificultad de seguir la línea de sus relatos.
“Lo hago con creciente dificultad. Es difícil, miro hacia atrás y me digo ¿de verdad tenía que hacer siete reinos? Cinco reinos hubieran estado bien”, ironizó el autor.
Aunque también mencionó que esos entretejidos literarios son una afrenta para los lectores, pues los autores siempre dejan cabos sueltos en sus relatos para que esos sean motivo de discusión por parte de quienes toman parte de las historias narradas desde la lectura.
De tal forma que también reconoció la importancia de sus seguidores, pues mencionó que regularmente los escritores de ciencia ficción fantástica no llegan a conocer el grueso del público que se declara fan de sus obras. Mencionando el caso de Jack Vance, escritor norteamericano de ciencia ficción y fantasía.
Señalando también que durante su adolescencia le hubiera gustado haberle escrito a Tolkien, autor de la saga El señor de los anillos, pues sus historias fueron motivación para el autor de Games of Thrones.
