A principios de octubre, las mansiones de dos de las grandes estrellas de la NFL, Patrick Mahomes y Travis Kelce, fueron víctimas de robos, según informaron tanto la Oficina del Sheriff del Condado de Cass, como medios de comunicación estadounidenses, un par de incidentes ocurrieron con solo 48 horas de diferencia.
Hasta el momento, las autoridades continúan investigando ambos casos, aunque por ahora no hay detenidos.
De acuerdo con los documentos policiales obtenidos por TMZ, el primer robo ocurrió en la casa de Mahomes en Belton, Missouri, alrededor de la medianoche del domingo 6 de octubre.
Al respecto, las autoridades indicaron que no se hallaron indicios de entrada forzada, lo que ha dejado en duda si se produjo un robo significativo en términos de objetos sustraídos. La Oficina del Sheriff del Condado de Cass confirmó el incidente, que también fue reportado por la estación WDAF.
Residencias en zonas de lujo
La mansión de Mahomes fue adquirida por aproximadamente 400 mil dólares y es un complejo de lujo especialmente adaptado para la familia del quarterback, donde vive junto a su esposa e hijos. La propiedad ha llamado la atención debido a su alto valor y sus características personalizadas.
Sólo dos días después, el 8 de octubre, en las primeras horas de la madrugada, la residencia de Travis Kelce en Leawood, Kansas, fue objeto de un segundo robo.
Este ocurrió justo después del partido entre los Kansas City Chiefs y los New Orleans Saints en el Arrowhead Stadium. La policía local recibió la llamada de emergencia alrededor de la 1:36 a.m, donde se informó que los delincuentes forzaron una puerta trasera e ingresaron a la propiedad para robar alrededor de 20 mil dólares.
A pesar de la similitud temporal entre ambos robos, aún no hay pruebas que conecten estos hechos.
Taylor y Travis no estuvieron presentes en el robo
Se ha confirmado que tanto Kelce como su actual pareja, la cantante Taylor Swift, no estaban en la casa durante el robo. Según fuentes cercanas a la pareja, ambos pasaron la noche del 7 de octubre en un hotel del centro de Kansas City.
Fuentes cercanas a la pareja aseguran que la residencia ubicada en Leawood, Kansas, fue comprada por el deportista para compartirla con Taylor. Sin embargo, ninguno de los dos se ha pronunciado al respecto.
Los representantes de Mahomes y Kelce no han respondido a las solicitudes de comentarios sobre los incidentes.
Mientras tanto, las investigaciones continúan, y se están analizando otros robos similares en la zona, lo que podría sugerir que los asaltos a las propiedades de las estrellas de la NFL podrían formar parte de un patrón más amplio de delitos en la región.
