Talento sobre las batallas, Enrique Arreola en El Autor
El actor Enrique Arreola se suma al elenco de El Autor, pieza que busca estremecer al público al llevarlos a una reflexión sobre el ser y su presente
Karina CoronaEn diversas ocasiones, el dramaturgo, actor y director británico Tim Crouch dijo que el teatro no es el dominio del realismo, pues en su corazón hay una invitación a ver algo más, y que el público tiene la última palabra, pues es el que le da sentido a una obra.
Bajo esta firme creencia, Crouch ha creado mundos escénicos que dejan a un lado las convencionalidades del teatro, es el caso de El Autor, escrita en 2009, y que en esta ocasión llegará al Foro Shakespeare gracias a la dirección de Benjamín Cann, realizador y guionista de cine.
“Es una obra que ha cobrado su propio peso por seguir viva, ha transitado dos años para llegar al Foro Shakespeare. Es una gran fortuna tener nuevamente un público presencial y que viva el fenómeno teatral como ya lo extrañábamos”, comparte el actor Enrique Arreola, quien se suma al elenco para esta temporada.
El Autor sumerge a la audiencia en un juego de roles que rompe con la línea que separa de manera tajante a los actores del público, siendo este también un creador más de la obra.
El Autor, obra para contar el presente
Se trata de una pieza escénica que sucede dentro de la audiencia, quienes cuentan el proceso de una obra de teatro. Experiencias y anécdotas cosechadas por los espectadores y actores, como un acto tras bambalinas, van revelando reflexiones cada vez más densas, profundas, que derivan en sí, en la esencia humana.
“La obra sucede, básicamente, en la mente del espectador, a través de la palabra. Somos cuatro actores en escena contando la historia del espectador, del actor, del autor, en la que se van a llevar una muy buena sorpresa”, asegura Arreola.
Al iniciar el montaje se anuncia “Llega a tu butaca y siéntate cómodamente. Relájate al tiempo que la historia se va revelando. Para ti. Contigo. Acerca de ti. Voltea a ver a tu vecino. Tal vez algo está sucediendo”, acto que, a decir de Enrique Arreola, se activa gracias al público.
“Tenemos la fortuna de contar con muchos estímulos en esta época de nuestra vida, pero el principal es nuestra mente, el creador de historias es nuestra cabeza, y de llevarlo a los sitios de nuestra experiencia y emoción, a donde queramos. Ahora que estábamos confinados se hace la invitación a ir a mundos insondables, maravillosos, inmersos de nuestra imaginación e intelecto y El Autor nos invita a eso”, detalla.
A decir del actor, la historia provocará una introspección digna de llevar a casa para dilucidar lo que se develará en escena.
Entre los temas que se abordarán se encuentran la sobresaturación de las redes sociales, un hecho “devastador” para la sociedad, así como la sobrecarga informativa a la que todas y todos están sometidos.
“Lo que verán de verdad les va a mover la entraña, es una obra fuerte, cruda. Pero lo que sucede con El Autor es que da la chance de sentarte, serenarte y escuchar a fondo, nos permite vivir hacia otro lado de las posibilidades que este mundo tan atroz nos devora”, indica.
La pieza invita a que el público se conmueva en un momento donde la actualidad satura todos los sentidos.
“No quiero que la obra parezca solemne, porque no lo es. Tanto la inteligencia de Benjamín, en la dirección, como de Tim, en la propuesta autoral, tiene una dosis acertada de humor y tragedia, como es nuestra realidad y del mundo”, opina.
30 años en el teatro
Aunque Enrique Arreola estuvo nueve años en la Compañía Nacional de Teatro, confiesa que El Autor ha sido uno de los trabajos más trepidantes que ha hecho. Más ahora, después de no haber pisado los escenarios debido a la pandemia.
“Hace mucho tiempo no hacía una obra tan estremecedora en cuanto a lo que relata, porque todo está en mi mente, y en esta obra Benjamín hace un trabajo de dirección excepcional, cuidadoso, muy auténtico”.
“No había una obra que me marcara tanto en cuanto al esfuerzo emocional e intelectual que hay que ponerle, es un reto mayor, no es fácil abordar a un personaje como este, no es sencillo por lo que plantea, pero afortunadamente tenemos la oportunidad de estar aquí”, cuenta.
Luego de haber estado en series y películas, el actor regresa a las tablas en un momento en el que ve la urgencia por compartir una historia con el público, así como compartir la esencia más pura del teatro y su atmósfera.
Ese instante, que describe Arreola como una vibración, al dar la tercera llamada, y un mensaje tan necesario como el contar con el arte escénico el presente, algo que difícilmente el actor comenta difícilmente otro tipo de arte puede generar en una audiencia.
“Ha sido muy generoso volver a los escenarios, a las tablas, y ver que uno y el público está ávido de la escena, de que le cuenten historias y dejarse conmover, es parte de este mundo que nos ha tocado vivir en esta época”, cuenta.
De esta forma, Enrique Arreola se encuentra feliz y conmovido porque con esta obra inicien los festejos de tres décadas dedicadas al hecho escénico, algo que lo conmueve, pues comparte que el teatro siempre le da vida.
“El teatro me regresa al centro, es mi manera de vivir, mi plataforma para contarle al mundo lo que soy, lo que tengo que contar. El cine me hace contar historias maravillosas, pero el teatro me regresa al ser humano que todos anhelamos ser. No me imagino haciendo otra cosa, me ha hecho vivir magníficamente”.
“Soy un hombre muy pleno y feliz a mis 50 años, porque el teatro me lo ha dado en bandeja de oro. Hay que celebrar que el teatro siga siendo parte fundamental de la construcción de una sociedad, si los que hacemos teatro no creemos en eso, creo que estamos perdidos, por eso tengo mucha carrera y mucho qué aportar y dar. Cuando veo hacia atrás, me digo ‘lo hemos hecho muy bien’”, concluye Enrique Arreola.