Su amor por los perros y gatos lo llevó a crear el Pet Film Festival Tepoztlán

Cinco años de esfuerzos han valido la pena para Michael Ramos-Araizaga, quien, a través de Pet Film Festival Tepoztlán, hace una celebración filantrópica con la mejor selección de películas que honran y promueven el respeto a los animales
Karina Corona Karina Corona Publicado el
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Michael Ramos-Araizaga es archivista fílmico, profesión que le ha permitido rescatar del olvido un memorial cinematográfico, sin embargo, al no encontrar un trabajo fijo en México, se tuvo que diversificar y dedicarse a la gestión de festivales de cine, como Pet Film Festival.

Araizaga dice que no se imagina sin un compañero canino a su lado, por lo que, desde hace siete años, se mudó a Tepoztlán con sus dos perros. Posteriormente, adoptó a cinco caninos en condición de calle. Ver esta situación, fuera de desmotivarlo, lo impulsó a crear un proyecto con el que pudiera generar conciencia, no sólo sobre el cuidado de perros, sino también, en el mundo animal.

Pet Film Festival Tepoztlán nació por amor y respeto a los animales, además de unir su pasión por el cine, dos temas que lo motivan para seguir con este proyecto independiente.

No sólo son películas de perros y gatos chistosas, son películas que buscan abonar en estos temas, que la gente conozca su importancia, porque no había un festival dedicado a estas temáticas y se nos hizo pertinente generar este espacio de reflexión, donde las personas que amamos a los animales nos podamos reunir y tratar de encontrar puntos de conocimiento, es un pretexto para apapachar a las mascotas
Michael Ramos-AraizagaDirector de Pet Film Festival Tepoztlán

A lo largo de cinco años, su principal motivación han sido los animales y promover el cuidado de su entorno por medio de cintas que reflejan las acciones que se pueden hacer. Por ello, desde el año pasado, ha dedicado las ediciones a especies en peligro de extinción; en 2020 fue en homenaje a los elefantes, ahora harán un énfasis en los primates, principalmente en tres que son endémicos del país: el mono araña y dos tipos de monos aullador.

Además, contarán con el apoyo del Grupo de Estudios Transdisciplinarios en Primatología, del Instituto de Ecología, A.C., quienes ofrecerán talleres sobre cómo crear máscaras, además de una charla titulada “Primates como mascotas/Tráfico de fauna silvestre”.

“Nuestra motivación es que con las películas la gente pueda ser consciente de problemáticas, desde el tráfico de especies marinas, que un primate no es una mascota, a entornos tan cercanos como el debido cuidado que le tienes que brindar a tu perro y de las cosas que puedes hacer para mejorar su calidad de vida. Creo que deberíamos de aprender de los animales, no tienen la avaricia del humano”, platica.

Al rescate

Además de la proyección de las cintas, para Michael es indispensable promover la adopción de perros y gatos, así como ayudar a los refugios donando croquetas, algo que los asistentes del festival pueden hacer, pues su boleto de entrada puede ser adquirido a cambio de una aportación de comida para perros.

Él ha puesto el ejemplo al rescatar a varios perros callejeros, quienes ahora son parte del festival, incluso, en honor a uno de sus amigos peludos más veteranos, instauró el Premio Domingo a las mejores películas, cuyo reconocimiento consiste en una placa de perro y así, además, se fomenta a los dueños a que le den a sus mascotas esta identificación.

“Este amigo lo encontramos hace cuatro años en un estado muy lamentable, infestado de garrapatas, algo espantoso, pero lo logramos sacar. No entiendo cómo la gente tuvo el corazón para echarlo a la calle, por eso la importancia de estas acciones, que cada uno desde nuestras propias trincheras hagamos algo”, expresa.

Lamentablemente las noticas sobre el maltrato animal han incrementado, como fue el caso del perro “Rodolfo Corazón”, que fue asesinado en Los Mochis, Sinaloa, o de los múltiples casos de tortura animal. A pesar de que en Morelos ya existen leyes que decretan que el maltrato animal es un delito, los casos siguen en aumento, hechos que, declara, hace se cuestione sobre la continuación del festival, no obstante, él sigue abogando por los derechos de todo ser vivo.

Todos los detalles sobre las actividades se pueden consultar en https://petfilmfesttepoz.wixsite.com

Pet Film Festival, una constante lucha

Además de esta lucha, la pandemia ha sido otra de las causas a las que se han tenido que enfrentar provocando una especie “de bache” al tener que trasladar, el año pasado, el festival al mundo virtual.

Luego de esa experiencia, Michael Ramos-Araizaga decidió hacer la quinta edición en formato híbrido, así la gente podrá disfrutar de las funciones nocturnas al aire libre y del catálogo virtual que estará disponible durante todo el festival.

A lo largo de cuatro años, Pet Film Festival Tepoztlán es la vía para aquellos cineastas y creativos que admiran y están fascinados por las mascotas y que han enfocado su mirada artística en hablar sobre los derechos de todos los seres vivos, algo que agradece el director de Film Pet, pues esto hace que el festival siga vivo.

“Hemos tenido suficiente material para poder hacer una buena selección oficial. Pienso que ya hay mucha más información, gente interesada en cambiar la situación, combatirla, pero esta locura en la que vivimos durante la pandemia hace que estos temas se pongan de vuelta en el reflector, afortunadamente, ha incrementado el interés de los cineastas” declara.

El ser independientes les motiva a continuar en su lucha, a pesar de las adversidades, pues su motor son los animales, lo que le inspira a transmitir un mensaje de respeto y cariño hacia todas las especies, de poder trabajar, por ejemplo, con grupos especializados como Justicia Animal, una asociación de abogados en perseguir el maltrato y brindar los primeros auxilios a las mascotas.

“Si bien eso nos abre muchas puertas con gente que nos dona su trabajo y comparte su sabiduría, también nos cuesta trabajo y dinero. A veces a la gente y las propias autoridades, necesitan una ayudadita para saber cómo aplicar la ley, las autoridades no dimensionan la importancia de querer a un animal y de ver que quienes son capaces de hacer una cosa salvaje a los animales, lo pueden hacer fácilmente a una persona”, concluye Michael Ramos-Araizaga.

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