Tengo un problema con el “spandex rock”, término que engloba el look rockstar más ridículo de la historia: pantalones spandex, cabello exageradamente largo y guitarras modificadas a la ridícula potencia.
Siempre creí que ese tipo de personajes se creían como paridos por los dioses de la música. Que por el simple hecho de ponerse accesorio y medio encima, el sentimiento y el talento les iba a llegar para componer una gran “power ballad”.
Sé que muchos no estarán de acuerdo conmigo, sobre todo porque yo no formé parte de esa generación (aunque muy probablemente hubiera optado por ser fan de Talking Heads, Sonic Youth, R.E.M. o Pixies). Y es que para mi, la década de los 80 en términos musicales va más allá de las voces chillantes, riffs potentes y pegajosos, solos de guitarra exagerados y vestuarios ridículos.
Este es un #Popcast visceral y el culpable es el trailer que vi de “Rock Of Ages”, una película musical del director Adam Shankman y que incluye música de Bon Jovi, Guns N’ Roses, David Lee Roth, Foreigner, Journey, Poison, Whitesnake, Twisted Sister, Quiet Riot, Skid Row, Scorpions y REO Speedwagon, por nombrar algunas de las bandas que crearon verdaderos himnos de “Guitar Hero” para llenar estadios.
La película es estelarizada por el mexicano Diego Boneta junto a actores como Russell Brand, Paul Giamatti, Catherine Zeta-Jones, la cantante Mary J. Blige, Alec Baldwin (que seguramente será lo mejor) y, por si fuera poco, Tom Cruise haciéndole de rockstar ochentero.
Sé que el del problema soy yo y que muchos padres de familia y directores de área o editores de Reporte Indigo vivieron sus mejores años al ritmo de Poison y Bon Jovi. “En gustos se rompen géneros”, pero no puedo evitar decir que de haber vivido esa época, hubiera preferido ser fan de Prince, por aquello de que tiene casi el mismo look, pero con un talento diferente… por lo menos él sí estiraba con splits ese spandex.
“La Era del Rock”, como la titularon en español, se estrena hasta el próximo 17 de agosto… tiempo suficiente para que los fans del glam metal preparen su vestuario.
Aunque bueno, confieso que no pude dejar de emocionar-me las veces que he escuchado a Girl Talk remixear “Don’t Stop Believing” de Journey, un gran guilty pleasure.