Si estás embarazada, y has sentido deseo sexual, quizás tengas algunas dudas como: ¿es seguro tener relaciones sexuales?, ¿puede lastimar al bebé?, ¿se pone en riesgo la salud de la mamá?, ¿aumenta las posibilidades de un aborto espontáneo?
¡Tranquila!, no te abrumes, si deseas tener relaciones sexuales con tu pareja y tu embarazo no es de alto riesgo, puedes hacerlo sin ninguna preocupación, ya que esta condición no te impide disfrutar libre y plenamente de tu sexualidad.
Pues, aunque muchas mujeres optan por eliminar totalmente las relaciones sexuales desde el momento en que confirman que están embarazadas, tener sexo no te afectará de ninguna forma y mucho menos a tu bebé.
Pero, ya que estamos aquí, te explicaremos más a detalle por qué se trata de un mito, cuáles son las mejores posiciones para que estén cómodos y disfruten; así como los beneficios que puede tener (sí, puede ser benéfico para ti).
Hablemos del líquido amniótico
Antes de desmentir algunos mitos, es importante que conozcas qué es el líquido amniótico y cuál es su función. Esta es una sustancia compuesta por proteínas, hidratos de carbono, glúcidos y electrolitos que ayudarán al desarrollo de tu bebé.
Y, además de ser vital para el crecimiento de los pulmones y mantener la temperatura adecuada y constante para el pequeño que se está formando; una de sus principales funciones es protegerlo.
Pues el sitio Reproducción Asistida, explica que el líquido amniótico “amortigua los posibles traumatismos abdominales en la madre y/o el efecto de las contracciones uterinas”, también ayuda que el feto se pueda mover libremente sin lastimar a su mamá.
De esta manera, tu bebé no solo está protegido ante cualquier lesión por los músculos fuertes del útero, sino que también por el líquido amniótico que actúa como una almohada. Además de un tapón de mucosidad espesa que sella el cuello del útero.
¿El sexo puede dañar al bebé? Desmintiendo los mitos más comunes
Como te habrás dado cuenta, con esta explicación gran parte de los mitos quedan completamente desmentidos, ya que al estar completamente protegido, es imposible que lastimes a tu bebé si decides tener relaciones sexuales.
“Lo único que (el feto) va a percibir es un cambio en tu respiración y el palpitar más fuerte de tu corazón, lo que no lo afecta”, explica el portal de Huggies. Así, puedes tener relaciones sexuales durante todo tu embarazo sin correr riesgos.
Es importante que tengas en cuenta que tener relaciones sexuales tampoco aumentará el resigo de tener contracciones o sufrir un aborto espontáneo, la expulsión del embrión suele ocurrir porque el feto no se está desarrollando normalmente y no por la actividad sexual, de acuerdo con Mayo Clinic.
Además, el portal Kids Health explica que “las contracciones que puedas sentir durante el orgasmo o inmediatamente después de él son totalmente distintas de las contracciones asociadas al trabajo de parto”.
Por su parte, Medicals News Today señala que tener sexo durante el embarazo no está relacionado con el aumento en los riesgos de parto prematuro, de acuerdo con estudios que se han realizado.
En estos casos no es recomendable
Como te contábamos al inicio, aunque en gestaciones normales el sexo y el embarazo se pueden llevar muy bien, tener relaciones sexuales en casos de alto riesgo no está recomendado. Así, deberás evitarlo si tienes:
- Sangrado vaginal sin causa aparente
- Estás perdiendo líquido amniótico
- El cuello uterino comienza a abrirse prematuramente (incompetencia cervical)
- Antecedentes de trabajo de parto prematuro o parto prematuro
- Placenta previa, es decir, cuando la placenta cubre parcial o totalmente la entrada del cuello uterino
- Si estás esperando gemelos, mellizos o trillizos
En caso de que tengas alguna duda sobre si deberías o no tener relaciones sexuales durante el embarazo, siempre puedes acercarte de tu médico de confianza para evitar cualquier situación que pueda ponerte en riesgo.
Algunos beneficios del sexo en el embarazo
Si no padeces ninguna de las condiciones anteriores y has tenido un incremento en el deseo sexual, tenemos más buenas noticias, ya que tener sexo en el embarazo puede tener beneficios. ¡Qué bendición!
El primero de ellos, es que podrías alcanzar un orgasmo con mayor facilidad y con más intensidad, ya que en el embarazo aumenta el volumen de sangre y gran parte del flujo se dirige hacia la pelvis facilitando que ellas sientan más placer.
La unión que tienes con tu pareja podría aumentar, ya que algunas personas que han tenido relaciones sexuales en el embarazo indican que se sienten más conectados luego de hacerlo, según con Medical News Today.
El sexo hará que tú y tu bebé se sientan más felices y relajados, ya que los orgasmos liberan endorfinas, los cuales son químicos que te hacen sentir bien, alviando las tensiones que puedas tener y eliminado el estrés.
¡Toma nota! Las mejores posiciones para hacerlo
En caso de que desees tener relaciones sexuales y estás embarazada, te decimos cuáles son algunas de las posiciones que pueden resultarte más cómodas, aunque también es un momento para experimentar nuevas poses en pareja.
Una de las más recomendadas es la postura de las “cucharas”, esto debido a que permitirá que la mujer descanse la barriga sobre la cama; mientras el hombre puede estimular zonas erógenas como el cuello.
También puedes ponerte boca arriba apoyada sobre tus codos, con las piernas flexionadas y abiertas. Para que te sea más cómodo, puedes apoyar tu pelvis sobre una almohada.
Una de las más recomendadas es que te sientes sobre el hombre, ya que además de ser favorable para el embarazo, es una posición que logra estimular a ambas partes de la pareja.
Recuerda que debido al cambio hormonal puedes sentir un gran deseo sexual o una total falta de interés, ya que además, muchas mujeres experimentan náuseas, dolor en los pechos y una mayor necesidad de orinar.
De esta manera, no te presiones, ya que lo más importante es que estés cómoda y puedas disfrutar de esta etapa; pero si decides tener sexo, no dejes de usar preservativo, ya que con ello previenes enfermedades de transmisión sexual (ETS).
También debes evitar tener relaciones sexuales con personas que puedan tener una ETS como herpes, verrugas genitales, clamidiasis o VIH, ya que éstas se podrían transmitir al su bebé, lo que sería muy peligroso.
