Sembrar plantas en el espacio
Un científico mexicano conquistó al equipo de la NASA al exponer una nueva práctica para hacer crecer lechugas y espinacas fuera de la Tierra con el fin de alimentar a los astronautas en sus viajes espaciales
Fernanda MuñozCon ayuda de la ciencia y la inteligencia humana, ya prácticamente todo es posible. En México, recientemente se celebró el logro que un científico nacional llevó a cabo para la Administración Nacional de la Aeronáutica y del Espacio (NASA).
El investigador, Ernesto Olvera, quien de niño anhelaba ser un astronauta, descubrió un nuevo método para hacer crecer plantas en el espacio, con el fin de que éstas sirvieran de alimento para aquellos que salen de la Tierra por días.
De acuerdo con la agencia espacial del gobierno estadounidense, comer alimentos frescos en el espacio era un sueño, porque todo lo que comen regularmente los astronautas se deshidrata mediante la congelación y sale de un paquete envuelto en un plástico retráctil.
Y aunque el crecimiento de la lechuga y otras plantas ya se había logrado concretar, el científico mexicano de 36 años mejoró este hecho, haciendo que funcionara mediante luz artificial con tecnología LED.
Para que Olvera presentara su estudio ante científicos de la NASA, tuvo que esperar un mes y medio para que autorizaran su exposición. En la reunión, el mexicano pudo explicar los avances que se están realizando en el Laboratorio de Iluminación Artificial (LIA) del Tecnológico de Pabellón del TecNM, y puntualizó que para encontrar este nuevo método habían tardado más de dos años con apoyo del Conacyt.
También, relató que la doctora Gioia Massa, del grupo de investigadores encargados de la producción de plantas en el espacio (Plant Production in Space Research Group), presentó a los demás científicos las instalaciones, laboratorios y experimentos que están actualmente en curso tanto en la Estación Espacial Internacional (ISS, por sus siglas en inglés) como en la NASA para el cultivo de plantas para ensaladas de lechugas y papas.
Al respecto, sus colegas norteamericanos agradecieron que en México se estuvieran desarrollando este tipo de investigaciones para la mejora de sus astronautas. Con este método buscan ayudar a que tomates y otro tipo de cultivos crezcan en el espacio y que la tripulación se los pueda comer mientras viajan a la Luna o a Marte.
Para poder realizar este tipo de estudios, de acuerdo con la NASA, los investigadores se plantean: ¿Cómo afecta la gravedad al crecimiento, al desarrollo y al metabolismo de las plantas?, ¿cuáles son los efectos de la exposición crónica a la radiación cósmica en las plantas? y ¿el entorno de los vuelos espaciales causa alteraciones en las interacciones de las plantas?