La cinta Nuevo Orden, de Michel Franco, ganó dos de los premios más importantes del Festival Internacional de Cine de Venecia, por lo que dos de sus protagonistas, Mónica del Carmen y Fernando Cuautle, comparten cómo se vivió este Festival y cuáles fueron las reacciones del público ante la película.
Nuevo Orden muestra una enorme guerra entre clases sociales, donde la clase baja está harta de todo lo que ha estado viviendo por años, pero llegó la hora en la que quieren venganza, quieren que sepan que no son menos.
“Durante la presentación la sala estuvo a la mitad y el público aplaudió al final de la película por seis minutos, fue bastante bonito, todavía siento esa emoción y se me enchina la piel al recordarlo. Es puro cine la película de Michel, es cruda, sí; dura, también, posee una situación muy álgida que se va desarrollando a lo largo de la trama, que es esta disparidad entre clases”, comenta Mónica del Carmen.
A pesar de la crudeza que muestra la película, la actriz opina que tiene mucha cinematografía, lo que permitirá apreciar a la Ciudad de México de una manera bien realizada, con una producción equiparable a una grande.
“El aplauso es algo que extrañaba mucho, ese sonido, y también la posibilidad de sentarnos a compartir los sentimientos que nos genera una película. Lo viví de una manera muy plena, era algo que extrañaba mucho y es un sueño hecho realidad, el haber podido ver Nuevo Orden y más el saber que ganamos esos premios”, cuenta del Carmen.
Mientras los presentes ovacionaban el trabajo de los mexicanos, Fernando Cuautle recuerda que entre ellos no se decían nada, solamente se volteaban a ver y sonreían, o por lo menos imaginaban que lo hacían, porque portaban sus cubrebocas; sin embargo, sus ojos los delataban.
“No podíamos decir gran cosa, sino recibir el aplauso, son muchas liberaciones que te ponen la piel chinita; estar recibiendo eso es maravilloso, pensábamos, ‘lo logramos’, y esto sólo es el comienzo de todo lo que viene”, cuenta el actor.
Dario Yazbek, otro de los actores de la cinta, pudo observar la reacción de Matt Dillon y de Cate Blanchett, jurados del Festival, quienes se veían sorprendidos ante la trama de la cinta.
“Al terminar de ver la película, un par de personas derramaron una lágrima y decíamos ‘¿qué onda? Si habla de México’, pero justo está bien lograda y genera empatía, que cualquier persona en cualquier parte del mundo puede decir ‘eso también pasa en mi país’. Creo que eso es lo que me llevo” afirma Fernando.
Por la noche, comparte Mónica, cantaron, rieron y brindaron, porque ya era un logro estar en el Festival, ya que les costó mucho trabajo estar ahí, por todos los protocolos sanitarios, como las pruebas de COVID-19 antes, al llegar y durante la festividad.
“Fue muy intenso, de una emoción fuerte, desde llegar, instalarnos, preparar las cosas y hacernos pruebas de COVID-19. Al otro día los junkets con medios de varios países, levantarnos muy temprano, nos maquilló la gente de Armani, desayuné con Naian González Norvind, con la que compartía habitación, y nos fuimos al Hotel Bulgaria”, recuerda la actriz.
A pesar de que durante la alfombra roja estuvo sólo un tercio de los fotógrafos que normalmente están y no hubo público presente, Del Carmen, quien también está nominada a un Ariel, se conmovió mucho al estar ahí.
“Se sentía una vibra muy intensa a pesar de eso, de que todos habíamos logrado llegar hasta ahí, después de toda esa incertidumbre ante las pruebas de COVID-19, después de la proyección, de los aplausos y de ver la película todos juntos, ya que no la habíamos podido ver”, asegura.
Un problema universal retratado en Nuevo Orden
Mónica del Carmen se dice orgullosa de todo lo que está pasando, porque siempre ha procurado hacer cine con creadores independientes, pero sobre todo con personas que admira y quiere, como Michel Franco.
Nuevo Orden fue su cuarta película al lado del cineasta, pero confiesa que ya hizo la quinta, de la cual no puedo dar noticias.
“Me parece muy importante ese compañerismo y esa manera de trabajar con Michel Franco, sé que es un cineasta hecho y derecho, propositivo, que está poniendo en alto el nombre de México. Ser una de las actrices de Franco me enorgullece”, señala la actriz oaxaqueña.
En Nuevo Orden, Franco pinta un panorama al cual no quiere llegar, donde utiliza a la ficción para poder distanciarse de la realidad y hablar y discutir sobre temas como la desigualdad y la lucha de clases.
“Ahora muchas cosas de la película tienen más valor, porque Michel en su momento planeó situaciones que de repente cuando estábamos filmándolas decíamos ‘no es demasiado’, como un tipo de filtro de seguridad para pasar de una zona a otra dentro del país, pero ahora con todo esto del COVID-19, no, no estaba del nada alejado”, opina Fernando Cuautle.
EI actor platica que le sorprendió la manera en que el cineasta logró trabajar con todo el elenco, ya que al ser tan distintos parecía imposible; sin embargo, todos consiguieron estar en el mismo tono, lo que fue el resultado de un trabajo de mesa de varias semanas, ensayos e indicaciones precisas.
“El darle voz a esta clase baja que existe no sólo en México, sino a nivel mundial, decir que algo está sucediendo ahí, algo no está bien desde hace mucho tiempo y algo se tiene que hacer; creo que es lo que más disfruté”, asevera Fernando.
Cuautle indica que ha sido un actor que viene “desde abajo”, pero que ha estado luchando para poder seguir subiendo escalones, por lo que se dice encantado de poder llevar estos temas a la pantalla.
“Ha sido fuerte, definitivamente, porque estamos acostumbrados a ciertos estereotipos en México, pero también creo que llegué en un momento afortunado para mí, porque es cierto que se le está dando oportunidad a gente que no es sólo de tez clara y he podido aprovecharlo en proyectos como este”, dice.
Si bien, la industria del cine está viviendo una transformación, Fernando sí se ha enfrentado a situaciones de racismo y clasismo, justo por no ser de un actor con un color de piel clara o no tener un estatus económico alto, por eso es que le encanta estar en Nuevo Orden.
El hartazgo social de las clases oprimidas es lo que detona todo en Nuevo Orden, cinta que se grabó en marzo del año pasado en locaciones de la Ciudad de México, aproximadamente por dos meses, en zonas cercanas al Estado de México.
La cinta de Franco también se presentará en los festivales de San Sebastián y de Toronto, para, posiblemente, llegar a México el primer trimestre del próximo año, ya cuando la crisis sanitaria sea menor.
Mientras Mónica del Carmen espera que otros festivales aprendan de la experiencia de “La Mostra” para que se puedan celebrar cumpliendo los protocolos de la “nueva normalidad”, Fernando Cuautle le pide a la gente que le dé una oportunidad al cine nacional, ya que es importante que poco a poco se vaya reactivando este sector en el país.