Salva a un ajolote a través de la campaña AdoptAxolotl

La campaña AdoptAxolotl tiene el fin de recaudar fondos adoptando de manera simbólica a una de estas especie
Karina Corona Karina Corona Publicado el
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Aunque el ajolote es una especie capaz de vivir hasta 15 años, actualmente a su alrededor existen diversas amenazas, por las cuales la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) lo ha catalogado como una especie endémica en peligro crítico de extinción.

En los últimos años se ha destruido y contaminado su hábitat. No obstante, para Luis Zambrano, investigador del Laboratorio de Restauración Ecológica del Instituto de Biología (IB) de la UNAM, esta lucha por su preservación aún es posible.

Zambrano, junto con un equipo de investigadores y académicos de la UNAM lanzaron la campaña internacional AdoptAxolotl, con la cual buscan recaudar fondos para la conservación y restauración del hábitat de esta especie endémica de Xochimilco.

“Estamos probando si verdaderamente tomamos conciencia, o no. Esta campaña llega justo después de la pandemia que nos hizo pensar que somos muy vulnerables y que todos tenemos que actuar, desde los más pequeños, hasta el gran empresario quienes, de repente, ven a los ajolotes como una forma posible de hacer ganancias, todo mundo tenemos que entrarle”, relata Zambrano.

En entrevista con Reporte Índigo, el especialista explica que era imperante actuar, pues desde hace 20 años que se han dedicado al cuidado del anfibio, han visto que su población ha bajado dramáticamente debido a la destrucción del hábitat, por la calidad del agua, a la introducción de peces como carpas y tilapias; además de la urbanización en los lagos de Xochimilco.

Se calcula la existencia de 36 ajolotes por kilómetro cuadrado, de acuerdo con el censo de 2014 realizado por su laboratorio. A diferencia del primero, realizado en 1998, cuando calcularon cerca de seis mil por km2.

“Desde el puente que acaban de construir, hasta las canchas de fútbol, aunque no parezca también son amenazas, de las cuales debemos debatir, pues están reduciendo el hábitat del ajolote”, explica.

Únete y apoya

AdoptAxolotl cuenta con los esquemas de donación “Invita a cenar a un axolote“, para los insumos del mantenimiento de la colonia y “Tunea la casa del axolote“, dirigido al mantenimiento de chinampas-refugio en Xochimilco. Todas y todos los interesados pueden apoyar desde 200 pesos hasta mil pesos.

El investigador también explica que los esquemas de adopción virtual consisten en un donativo mensual, semestral o anual, con los que se proporcionarán recursos para adoptar a un ajolote, al cual el donador podrá nombrar por el periodo de su membresía.

“Puedes nombrarlo como quieras, para garantizarlo, les llegará un certificado con la información del ajolote, su chip de identificación y su nombre. Queremos emprender en este laboratorio una forma diferente de conservación y de entender la naturaleza.

“Pero también es muy importante que la gente entienda qué está pasando en su hábitat, y este programa va en ambos sentidos. Yo creo que lo vamos a dejar abierto hasta finales de enero para que la gente haga conciencia de esta especie endémica”, sostiene.

Con el fin de mostrar la importancia de su hábitat, la UNAM y un grupo de chinamperos trabajan en el proyecto “chinampa-refugio”, el cual cuenta con 48 refugios, que corresponden a poco más de cinco kilómetros lineales de canales, en donde el ajolote pueda vivir sin amenazas.

“La chinampa es la base ecológica, ambiental y social de Xochimilco, razón por la cual es parte de nuestro patrimonio, nos da alimento y puede dar un refugio a los propios ajolotes. Todos tenemos que apoyar a los chinamperos que están partiéndose el lomo para mantener a los ajolotes. Por eso, este es nuestro granito de arena para apoyar, tanto a los chinamperos, como a la investigación”, ilustra el investigador.

Con estos dos proyectos, Luis Zambrano recalca la importancia de valorar a Xochimilco como un ecosistema fundamental para la cultura y el medio ambiente.

“En lugar de relacionar a Xochimilco como un espacio para las fiestas, pensémoslo. Nosotros no nos vamos a emborrachar a la pirámide del Sol, o a la Catedral, porque los consideramos una pieza fundamental; Xochimilco está vivo, es algo que nos han dejado nuestros ancestros y lo que tenemos que respetar y valorar”, detalla.

“Si logramos salvar el ajolote, quiere decir que como sociedad tenemos mucha esperanza en términos de solventar los problemas de la crisis ambiental”, señala el investigador Luis Zambrano.

Preservar la identidad

A lo largo de seis años, el Laboratorio de Restauración Ecológica ha recibido financiamiento gubernamental por parte de la alcaldía, apoyo que, a decir del especialista, trasciende independientemente de la posición política.

No obstante, debido al estado crítico del ajolote y su ecosistema, Zambrano cree que se deben unir esfuerzos para proteger a esta especie, de la cual desde el 2014 no se ha podido realizar un censo.

Con lo que se obtenga de la recaudación de fondos, Luis Zambrano medalla que podrían abrir más kilómetros en donde existan las “chinampas-refugios” y así poder realizar un estudio más detallado de los canales

“No sé si también es algo utópico, pero queremos ya salga de esta lista roja, de aquella en la que los humanos nos hemos encargados de posicionarlos. También que se llegue a comprender su valor en medio de esta cadena. Si lo logramos, hasta en 10 años estaría fuera de peligro, quizá estemos muy lejos de eso, pero ya lo estamos planeando.

“Sin los ajolotes perdemos identidad como mexicanos, son pieza fundamental de nuestra cultura, como lo es la comida o las artesanías, nuestra forma de ser. Si perdemos una especie icónica en la naturaleza, estamos perdiendo nuestra esencia como mexicanos y creo que eso es igual de grave que el cambio climático o la crisis ambiental”, reflexiona Luis Zambrano.

Todas las personas interesadas en adoptar un ajolote lo pueden hacer en: https://www.tiendaenlinea.unam.mx/

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