La tradición de la rosca de reyes tiene sus orígenes en la Edad Media, en países europeos como Francia y España, y fue durante la época de la conquista cuando esta costumbre llegó a tierras mexicanas, convirtiéndose con el tiempo en un símbolo de la festividad del Día de Reyes.
Dentro de la tradición, la persona que encuentra la figura del Niño Jesús en su porción de rosca debe comprometerse a cuidarla hasta el dos de febrero, cuando se celebra el Día de la Candelaria, una fecha muy significativa en la que los mexicanos honran a la Virgen de la Candelaria.
¿Dónde venden la Ternuri Rosca?
La cafetería “El Maravilla”, famosa por su temática inspirada en el mágico universo de Alicia en el País de las Maravillas, es la creadora de la innovadora “Ternuri Rosca”, una deliciosa variante de la tradicional rosca de Reyes que estará disponible a partir del 17 de diciembre, brindando un toque único a las celebraciones decembrinas.
Se ubica en la emblemática calle Jesús María 42, en el Centro Histórico de la Ciudad de México, “El Maravilla” ofrece a sus visitantes una experiencia inolvidable, sumergiéndolos en un ambiente que remite a los elementos más icónicos de la famosa obra literaria.
Este pintoresco establecimiento abre sus puertas de martes a domingo, de 11:00 a.m. a 7:00 p.m., convirtiéndose en un lugar ideal para disfrutar de una atmósfera mágica y llena de color, donde los sueños y la fantasía se hacen realidad.
¿Qué son los ternurines?
Aunque los ternurines, conocidos internacionalmente como Sylvanian Families, nacieron en Japón en 1985 gracias a la marca japonesa Epoch, fue en los años 90 cuando llegaron a México, trayendo consigo una nueva forma de entretenimiento para niños y coleccionistas. Fue la empresa Fotorama quien se encargó de introducir estos pequeños personajes al mercado mexicano, logrando rápidamente que capturaran la atención de los más jóvenes.
Sin embargo, fue en el último año cuando los ternurines experimentaron un resurgimiento y se convirtieron en una verdadera moda viral. Esto se debe en gran parte a su difusión a través de redes sociales como TikTok e Instagram, plataformas donde miles de usuarios comenzaron a compartir fotos, videos creativos y colecciones de estas entrañables figuras. Este fenómeno revivió el interés por los ternurines y además, los transformó en un objeto de deseo tanto para los coleccionistas como para una nueva generación de admiradores.
