El rock mexicano no ha muerto, es una de las premisas bajo las cuales “Mosy”, guitarrista y productor musical de la legendaria banda Ritmo Peligroso, mantiene su música y la de sus contemporáneos viva, en una industria cambiante.
Por ello, junto a su proyecto como solista y productor, el músico se ha dado a la tarea de juntar a diversas personalidades del rock, no sólo de México, sino de otras latitudes, para buscar reivindicar a una escena que muchos daban por perdida.
Desde su disco Elementos, trabajó con distintos músicos y cantantes del rock mexicano y con ello buscó explorar más a fondo el alcance de estos talentos en un evento que llamó Mosy and Friends.
El concepto nació antes de la pandemia, y demostró que la escena sigue siendo de las más escuchadas en nuestro país. Sin embargo, el confinamiento hizo que este proyecto pospusiera sus presentaciones.
Ahora, el concierto regresa de la mano de Denarios Event Planner y busca que esa escena, que estuvo detenida durante casi tres años, se reactive, y la música que los artistas crearon se siga escuchando, pero que sobre todo se renueve.
“Estamos intentando proyectar algo diferente con Mosy and Friends, va a ser una noche maravillosa. En nuestro país hay una escena que está dividida, pero la verdad es que la vieja guardia siempre está al pie del cañón”, afirma el músico y productor.
Este evento, que se llevará a cabo el sábado 2 de marzo en el Foro San Rafael, será más que una interpretación solemne de los clásicos que dan vida a esta música, será una fiesta en donde el estilo de Mosy se fusione con el de sus colegas rockeros y formen nuevos sonidos.
“En este evento se tocan canciones clásicas del rock mexicano, rolas emblemáticas de los invitados, pero les ponemos un toque más fresco, o jugamos con los arreglos, para que las canciones sigan renovándose”, afirma el vocalista de Ritmo Peligroso
En esta ocasión Mosy aparece como el anfitrión de este resurgimiento del rock mexicano y los invitados serán Kenny y los Eléctricos, Kazz de los Amantes de Lola, Xava Draco de Coda y Salvador Moreno de La Castañeda.
Mosy & Friends se llevará a cabo este 2 de marzo en el Foro San Rafael, a las 18:00 horas. Los boletos se encuentran a la venta en Boletia
Navegando a contracorriente en una industria cambiante
Para Mosy el rock no solo es una escena musical, es parte de una gran industria y como tal tiene sus crisis, la más reciente es la causada por las condiciones de confinamiento que puso a los artistas entre la espada y la pared al cancelar y posponer eventos y presentaciones que es de donde se nutre esta música.
A esto se suma la actual demanda y oferta musical basada en el género urbano, que ha ido dejando fuera a muchos músicos, quienes se enfocan ahora en reabrir espacios y foros para tocar y producir su música. Para Mosy, esta situación no ha sido ajena, y es parte de sus razones para integrar a sus contemporáneos y otros talentos mexicanos a colaborar no sólo en eventos como Mosy & Friends, sino también en producciones discográficas y nuevas propuestas.
“A mí me gustaría decir que ya no hay broncas, pero seguimos avanzando dentro de todos estos cambios, porque al final es eso, el rock es luchar por lo que quieres decir, lo que quieres expresar.
“Es una industria que está dolida, la industria musical mexicana en general, no hay muchas casas o sellos que están apoyando, no tienen dinero, eso es lo que vuelve más difícil para los músicos sobresalir, pero constantemente estamos sorteando estos cambios, al final es una industria de aferrados, si crees que tienes algo que decir y tienes talento es cosa de aferrarte”, afirma el vocalista y guitarrista.
Para Mosy, todo lo que tenga que ver con la música es su motor de vida, por eso desde que entró a Ritmo Peligroso como el miembro más joven hasta ahora, busca mantenerse en contacto con los artistas, seguir haciendo música, y seguir aportando para que el rock siga vivo.
Incluso, ya están integrados a las nuevas tecnologías, como la IA, involucrada en la elaboración del nuevo video de Ritmo Peligroso en colaboración con El Gran Silencio “Un minuto de silencio”.
“Para mí fue maravilloso trabajar con esta tecnología que sí tiene su complejidad, integrar con nuestra música, yo creo que como músicos, como artistas, no debemos pelearnos con las tecnologías, son herramientas, y ayudan a que sigamos avanzando y en la lucha”, concluye el músico.
