¿La mujer es libre de decidir sobre su propio cuerpo cuando se trata de otra vida involucrada en su interior? La eterna discusión de cómo proceder ante el aborto sigue vigente en Estados Unidos, aunque desde 1973 se haya despenalizado el aborto inducido por el caso Roe vs. Wade.
Y para retomar el tema las realizadoras Ricki Stern y Anne Sundberg decidieron grabar “Reversing Roe”, documental en el que dejan al libre albedrío la decisión que se quiera tomar en torno al aborto y se encuentra disponible en Netflix.
A lo largo de 99 minutos, las mujeres documentalistas registraron la opinión tanto de las detractoras como quienes apoyan el aborto en los Estados Unidos, sobretodo en momentos en los que se vuelve una discusión política que atenta contra el laicismo ya que se involucra a grupos religiosos a que tomen parte y son empujados por grupos republicanos.
“Reversing Roe” no es el único documental que habla de esto, “Lake of fire” (2006) que contó con la opinión de Noam Chomsky, Pat Buchanan entre otros, también ahonda en el tópico, así como otras producciones como “12th & Delaware” (2010), “After Tiller” (2013) y más.
Algo que expone el testimonial que distribuye el servicio de streaming, es que el aborto es toda una industria médica en Estados Unidos, donde hay médicos dedicados enteramente a esta labor, sin tener que operar en la clandestinidad, así lo comenta Colleen McNicholas, doctora que se dedica a este oficio.
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Aunque también se muestra la contraparte, de quienes son pro-vida y defienden a capa y espada que el aborto no debe ser practicado, así se ve en la opinión de Troy Newman de Operation Rescue, que se dedica a perseguir clínicas de este tipo y procurar que cierren sus puertas al público.
También en el documental se puede contemplar material de archivo de expresidentes estadounidenses como George W. Bush oponiéndose a la idea de una enmienda constitucional que prohíba el aborto, además de repasar el contexto histórico por el cual la Unión Americana se encuentra en esta gran división social que es perseguida por grupos religiosos e incentivados por el partido republicano, mismo por el que ganó Donald Trump las elecciones que lo llevaron a la Casa Blanca.
