De acuerdo con el libro Blood, Sweat & Chrome: La salvaje y verdadera historia de Mad Max: Fury Road, los protagonistas del popular filme; Charlize Theron y Tom Hardy, generaron odio entre ellos en el set.
De acuerdo con este material, que recoge los testimonios de personas involucradas en la producción, Theron y Hardy vivieron una serie de rencillas durante la filmación.
Kyle Buchanan se dio a la tarea de meterse en los secretos de esta exitosa producción, dirigida por George Miller y ganadora de seis premios Oscar.
El material literario, que salió a la venta en Estados Unidos el pasado martes, revela este y otros secretos de una de las películas más taquilleras de 2015.
‘MAD MAX’: FURIA EN LA CARRETERA.
Kyle Buchanan revela en el libro ‘Blood, Sweat & Chrome’ el tenso ambiente vivido en el rodaje de ‘Mad Max: Fury Road’ pic.twitter.com/QbDouWTFX8— LUIS Creative Producer🎬 (@LUIS8171073011) February 23, 2022
Un prometedor inicio
Según la directora de casting de Mad Max, Ronna Kress, en un inicio, Charlize Theron y Tom Hardy parecieron tener una química inigualable tras un primer encuentro.
Según Kress, al verlos platicar en el estacionamiento, después de su primera prueba juntos, sintió que se veían tan bien juntos que incluso chocó su auto.
“Fue algo indescriptiblemente perfecto… Después de la videollamada, Tom, Charlize y yo estábamos en el estacionamiento. Los miré y se veían tan increíbles juntos… No había dudas en mi mente de que habíamos hecho lo correcto, y mientras me despedía de ellos, hice retroceder mi auto contra un poste y choqué. Charlize corrió, ‘Dios mío, Ronna, ¿estás bien?’. Le dije que sí, que solo los estaba mirando. Fue así de intenso”, contó Kress a Buchanan.
La producción de Mad Max: Fury Road duró nueve meses y se llevó a cabo en el desierto de Namibia y Sudáfrica.
Una producción accidentada
Según las entrevistas realizadas por Buchanan al elenco y miembros de la producción, varios de ellos se sintieron frustrados debido a los métodos de Miller al filmar.
De acuerdo con sus testimonios, en ocasiones comenzaban el día sin un plan ni guión para filmar, mientras que en otras ocasiones grababan segundos o 14 horas seguidas, para solo dejar medio minuto de este material en el metraje final.
“Fue difícil esa situación para Tom. Fue fuerte verlo. Realmente tuvo momentos de frustración y de ira. Charlize también lo sufrió, pero siento que él fue quien realmente se desquitó más con George. Y fue un fastidio verlo”, reveló Zöe Kravitz, una de las coprotagonistas del filme.
Fue en este momento cuando comenzaron a surgir los problemas entre Hardy y Theron.
Guerra entre los protagonistas
Debido a diferencias en el método para abordar las escenas a realizar, Charlize y Tom comenzaron a mostrar diferencias, mientras Hardy buscaba llevar cada escena al extremo, experimentando y pidiendo justificaciones para cada una, Theron seguía las instrucciones del director.
“Éramos como dos padres en la parte de atrás del auto. De hecho, gran parte de las escenas del film transcurren dentro de distintos vehículos, con ellos en la parte delantera y parte del elenco en la trasera. “Nos la pasamos peleando o directamente ni nos hablábamos. No sé cuál de las dos situaciones fue la peor… Y nuestros coprotagonistas tuvieron que lidiar con esa tensión. ¡Fue horrible! No era un ambiente de trabajo propicio. Me disculpo profundamente”, reveló Theron para Buchanan.
Uno de los puntos de quiebre entre Theron y Hardy fue el día que ella y sus compañeros se prepararon para la filmación y el actor no se presentó al llamado a tiempo, llegando tres horas después.
Tras recibir los reclamos de Theron, quien lo llamó irrespetuoso y dijo que debían multarlo con 100 dólares por cada minuto que tuvo a todo el equipo esperándolo, Hardy se acercó amenazadoramente a ella.
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“Él se acercó a ella y le dijo: ‘¿Qué me dijiste?’. Era bastante agresivo. Ella realmente se sintió amenazada, y ese fue el punto de inflexión, porque luego dijo: ‘Quiero a alguien como protección’”, recordó el camarógrafo Mark Goellnicht.
Sin embargo, el guardaespaldas improvisado de Theron, Doug Mitchell, daba la razón a Hardy, por lo que la actriz jamás se sintió segura con su compañía.
“Llegó un momento en el que las cosas se fueron de control y me pareció que era mejor que ese lugar lo ocupara una productora. Mucho de lo que sentí que me venía de Doug fue: ‘Oh, al diablo. Solo lo diré’. Era un hombre que perdonaba a otro hombre por un comportamiento realmente malo, y no me sentía segura”, contó Charlize.
Por su parte, Hardy recordó a Charlize como “intensa” en su actuación y aseguró que no tuvo ningún problema con ella.
“Charlize es una mujer intensa. Muy intensa, en realidad. En el buen sentido. Quiero decir… Mírala en Monster: no es alguien caminando tranquilamente por el parque. No podés evocar ese tipo de autenticidad sin tener una tremenda riqueza y habilidad artística. Es una actriz muy seria. Entonces, no; no entiendo por qué ella alguna vez se sentiría intimidada por mí o de alguna manera sentiría miedo. Creo que eso fue una tontería“, dijo.