Tony Haile es el CEO de Chartbeat, una plataforma que ayuda a medios como TIME, Gawker, y Upworthy a medir la cantidad y calidad de las visitas que reciben sus sitios Web .
Así que cuando Haile recurrió a Twitter para compartir que “no han encontrado ninguna correlación entre lo que es compartido en redes sociales y lo que la gente está leyendo”, el mundo se sorprendió.
Sin embargo, la premisa no es tan extraña. ¿Cuántas veces has notado en los comentarios de una publicación en Facebook o en las respuestas a un tuit que las reacciones se tratan solamente sobre el título?
El ejemplo más reciente y notorio de este fenómeno es, quizá, el de la portada de TIME internacional sobre el presidente Enrique Peña Nieto, en la que usaron como título la frase “Saving Mexico” (“Salvando a México”).
Tras hacerse pública la imagen, miles de usuarios de redes sociales expresaron su indignación a través de ellas y el tema resultó en varios Trending Topics y cientos de miles de retuits. Y, sin embargo, leer el artículo puedo haber eliminado la indignación.
Su autor, Michael Crawley, corresponsal de política exterior de la revista, fue culpado de recibir sobornos y amenazado por los usuarios. Así que recurrió a Twitter para aclarar la situación.
“Queridos amigos mexicanos: lean la historia”, expresó en el sitio de microblogging, “no dice que México o EPN sean perfectos. Habla de la corrupción, los cárteles y las críticas por las reformas”.
Si los usuarios hubieran entrado al sitio, hubieran notado que el título de la nota era muy distinto: “Mexico’s new mission” (“La nueva misión de México”). Pero este es el pan de cada día en las redes sociales, y ahora Chartbeat lo confirma.
Josh Schwartz, el jefe de interpretación de datos de la plataforma, mencionó a The Verge, que la afirmación de Haile era específicamente sobre lo compartido en Twitter. Sin embargo, aclaró que es lógico esperar lo mismo en Facebook.
“Es obvio que hay una correlación entre el número de tuits y el volumen total de tráfico que va a un artículo”, admitió Schwartz, “pero no hay una relación entre las historias que son más tuiteadas y las que son, de hecho, leídas”.
Esto quiere decir que los usuarios de esta red social suelen retuitear sin leer. Aunque ninguno de los expertos quiso especuló sobre las razones sobre las razones (porque confesaron necesitar más información), en The Verge plantearon algunas posibilidades.
Primero, la mayor parte de los clicks a ligas en redes sociales provienen de dispositivos móviles, como smartphones o tabletas, y las personas son menos propensas a leer cuando no se encuentran en una computadora.
También opinan que es posible que compartan rápidamente aquellas historias que parecen contener el punto del texto en el título (como el controversial “Saving Mexico”), y crean que ya tienen información suficiente.
Otra posibilidad es que en “la era de leer por encima”, los usuarios solamente echen un vistazo a la nota y no entren en detalles, lo que disminuye el tiempo de su visita al sitio Web.